domingo, 28 de diciembre de 2014

Capítulo 42

Lo que estaban viendo mis ojos no lo asimilaba mi cabeza. Creo que hasta estaba llegando a ser algo repulsivo y todo. Justo cuando tenía pensado ir a hablar con ellos Zayn me agarra la mano en la que tengo mi maleta.

-¿Honey?.

-Em, dime.- Digo mirándolo a la cara.

-Venga, te toca ir a buscar la llave de tu habitación y la de Alex.

Ni siquiera me había dado de cuenta de que ya estaban repartiendo las habitaciones. Me quedé tan ensimismada mirando como mis dos amigos se comían a besos que dejé que todo lo demás no me importara. Me acerco a la profesora y ella deposita la llave en mi mano. Esperamos a que todas habitaciones estuvieran repartidas para abandonar el hall.

-¿Qué número de habitación tienes?.

-83, ¿en cuál estas tú?.

-Yo tengo la...- Rebusca en los bolsillos de su pantalón hasta que la encuentra.- 100, así que estoy un piso más arriba que tú. Después de que deje todo colocado voy a recogerte.- Se acerco a mi y besa mi frente.

Tengo que acostumbrarme a estos acto de cariño en público, aunque no sé cuanto durarán. Tengo la esperanza que durante la excursión nos podamos conocer un poco mejor de lo que ya nos conocemos. Sé que cuando lleguemos a casa si esto sigue hacia delante tendremos que escondernos durante un tiempo, ya no solo por mí, sino por él. No quiero que esto que estoy siento por él acabe rápido. Le mando un WhatsApp a Alex con el numero de nuestra habitación, ya que ella estaba muy ocupada con Liam como para hacerme caso. Justo acababa de salir del cuarto de baño cuando alguien toca a la puerta. La abrí y me encuentro con ella.

-¡Hola!.- Me dice eufórica.-¿Qué tal el viaje?.

-Bien, aunque creo que tú tienes muchas cosas que contarme. Si quieres te hago un pequeño adelanto, ¿qué tienes con Liam?.- Se sienta en la cama tapándose los ojos con las manos e intentando no sonreír. Me siento a su lado y espero.

-¿Nos has visto?.- Subo las cejas.

-¿A ti qué te parece?.- Suelta una carcajada y se tumba en la cama con los brazos estirados hacia arriba.

-Vale, por lo que veo se puede decir que te ha gustado.- No es que esté molesta ni nada parecido. Pero mis dos mejores amigos tienen algo más allá de la amistad y hay que reconocer que es ¡muy raro!. Asiente con una sonrisa de oreja a oreja.

-Te aseguro que no es gay.- Las dos reímos a carcajada limpia.- Dios, es que creo que me he enamorado de él.- Me pongo seria en ese mismo instante y ella se sienta mirándome.

-Ala, ala...Eso es un poco fuerte, ¿no?.- Se encoge de hombros.- A ver, no te quiero estropear el momento pero acabas de salir de una...digamos relación, un poco escabrosa y creo que te lo debes tomar con calma.

-Becca, Liam jamás me haría lo de Louis.- Asiento frenéticamente.

-Lo sé. ¡Vamos que si lo sé!. Pero también sé que a él le gustas desde hace muchísimo tiempo y no quiero que os hagáis daño. Lo único que te pido es que tengas las cosas claras antes de hacerlas, ¿vale?.- Asiente.- ¡Y bueno que os doy mi bendición!.- Me lanzo a abrazarla y ella me responde al instante.

-¡Idiota!.- Se aparta un poco.- No, en serio. Gracias.- Sonrío y haciéndome la interesante me soplo las uñas y me las froto en el hombro.

-Nah...- En ese momento alguien golpea la puerta y Alex se levanta a abrir mientras me grita.

-¡Pero mira que eres tonta!.- Me agacho a abrir la maleta y saco algunas cosas para colgarlas en perchas, pero cuando me doy cuenta de que Alex todavía está en la puerta y se oyen susurros me acerco y me encuentro a Zayn con cara de enfadado y a Alex diciéndole algo que no llego a escuchar porque se calla justo en ese momento. Frunzo en ceño.

-¿Qué pasa?.- Alex me sonríe.

-Nada, ¿nos vamos?.- Pregunta Zayn sin quitar a Alex el ojo de encima. ¿Qué me estoy perdiendo?. Miro a Zayn en busca de una explicación.- ¿Estás bien?.

-Sí, joder. Nos vamos, ¿o no?.

-Eh, no la hables así porque ella no tiene culpa.- Tengo ganas de pegarle y luego cerrarle la puerta en las narices. ¿Por qué me trata ahora así?. Y más delante de mi mejor amiga. En vez de eso me acerco a la cama a por el bolso y salgo de la habitación para irme con él, sé que así es la única manera de que me cuente que está pasando.- Llámame si necesitas algo.

-Ya estoy yo si necesita algo.- Alex pone los ojos en blanco.

-Lo que sea. Te quiero.- Después señala a Zayn y con los ojos entrecerrados le dice.- A ti no. Tú me das náuseas.- Acto seguido cierra la puerta dejándonos en el pasillo a Zayn con puños apretados y la mandíbula tensa y a mí desconcertada.

-No entiendo nada, Zayn. Pero sea lo que sea te tienes que relajar, ¿te das cuenta de como me has hablado?.- Me empuja hasta dejarme pegada a la pared y después me abraza con fuerza.

-Lo siento.- Susurra. Siento un nudo en el estomago que me hace enterrar los dedos en su pelo y acariciarle el cuero cabelludo, No sé cómo lo hace, pero me es imposible enfadarme con él.


miércoles, 5 de noviembre de 2014

Capítulo 41

-Hola.- Susurro a Harry cuando me siento a su lado. Realmente no sé lo que estoy haciendo.

-Hey.- Me mira esperando que diga algo.

-Mmm...ayer hablé con Alex.- Asiente.

-¿Lo habéis arreglado?.

-Sí, me dijo que habla contigo de vez en cuando.- Se encoge de hombros.

-Se podría decir que nos llevamos bien. ¿Tú estás mejor?.

-Lo voy asimilando poco a poco...

-Bueno, sé que estás enfadada conmigo, pero si necesitas algo, puedes contar conmigo.- Sí, bueno, como sea como la otra vez...- Te puedo asegurar que esta vez va en serio.

-Me has hecho mucho daño Harry. Pero...digamos que en parte puedo entenderte, Louis es tu amigo y...

-Era mi amigo.- Recalca.

-Bueno, era tu amigo y querías ayudarle. Liam nunca me ha pedido algo así, pero estaría dispuesta a hacer todo por él.

-Liam nunca te pediría hacer algo así.

-Tienes razón.

-Lo siento mucho Becca. Parezco un disco rayado, pero de verdad que lo siento.

-Te creo, pero entiéndeme tú a mí, por mucho que te perdone me va a volver a costar mucho volver a confiar en ti...

-¿Puedes intentarlo?.

-Supongo que...sí...

Apenas llevaba allí unos 10 minutos cuando sentí una presencia a mi lado, estaba a punto de

-¿Qué hacéis? -Me tenso al escuchar su voz detrás de nosotros. Solo espero que no escuchara nada de lo que estuvimos hablando, aunque no fuera mucho.

-Ah nada, hablar. -contesta Harry, el cual no parece que este nervioso.

-¿Sobre qué? -dice Zayn

-Sobre cosas, ¿Te importa? -Oh no, pelea de gallitos no, por favor. Intento pararlo pero no tengo ninguna manera de hacerlo.

-Si, ¿Qué pasa, te gusta? -Me giro para poder mirarle a los ojos. Esta serio y se que se esta muriendo por dentro por saber la respuesta. A veces pienso que es demasiado tonto para saber que el único que me gusta y me importa es el. Tiene la mandíbula apretada.

-No, ¿Y a ti? 

-Si, así que devuélvemela -nerviosa y sin poder articular ni una sola palabra por lo que acaba de decir tan abiertamente, me cambio de sitio cuando Niall vuelve.

Me siento erguida en el asiento y no digo nada, ni tan siquiera lo miro porque básicamente me muero de vergüenza. Nunca antes le había gustado a un chico, o al menos el no me lo había dicho. De repente Zayn pega su nariz a mejilla, coloca una mano en mi rodilla y me pregunta

-¿Qué pasa Honey? -Me encojo de hombros -¿Te encuentras mal? -Niego -Vale -vuelve a sentarse en su sitio y fija su visa al frente, haciéndose el enfadado. Aguanto todo lo que puedo, pero ya ha conseguido que me sienta culpable.

-Has dicho que te gusto -susurro.

-Si Becca, es que me gustas -me ruborizo.Yo a ti te gusto, pero yo estoy enamorada de ti. Eso es diferente. Pienso.

-Nadie me lo había dicho antes -sonríe, me pasa el brazo por mis hombros y me atrae hacia el. Oh dios mio, su jodido olor...

-Mejor, más para mí -sonrío con la cara en su pecho. Ojalá se detuviera el tiempo y pudiésemos estar así para siempre. Me alza la barbilla -¿Yo te gusto? 

-Mucho, Zayn -si tan solo supiera la mitad de lo que le quiero... Se pasa la lengua entre los dientes y sonríe, acto seguido se agacha hasta mis labios y me da un casto beso, pero para mi eso es más que suficiente ahora mismo.

La hora y media siguiente estuvimos juntos, paramos en una gasolinera durante unos quince minutos para tomar algo e ir al baño y después seguimos con el trayecto, done Zayn puso una película en su móvil y la vimos juntos compartiendo cascos y su mano entrelazada con la mía.

-A ver chicos - dice la profesora una vez que el autobús en la ciudad.-Salimos de forma ordenada, cada uno coge su maleta y esperamos en la recepción para asignaros la habitación.

Una vez je bajado y cogido mi maleta, me meto en la recepción del hotel y busco a Liam y a Alex, para preguntarles que tal el viaje. Y los encuentro a los dos, ¡vaya que si los encuentro! Liam abrazando a Alex y esta dándole pequeños besos en los labios.


domingo, 21 de septiembre de 2014

Capítulo 40.

Escucho un golpe sordo procedente del baño y literalmente corro a abrir la puerta para ver lo que ha pasado. Me encuentro con Zayn sentado en el suelo del baño intento con todas sus fuerzas quitarse la camiseta. Le miro con mala cara, ¿por qué se ha tenido que emborrachar?. ¡Joder ha impregnado todo el baño al olor horripilante del alcohol!.

-¿Tú te crees que esto es normal?.- Me agacho hasta él y le ayudo a levantarse para sentarlo en la taza del inodoro.- Levanta los brazos.- Hace lo que le mando y le quito la camiseta.

-¿Vas a bañarme?.- Pronuncia con voz ronca. Pongo los ojos en blanco sin que él me vea.

-¿Prefieres que llame a tu madre?.- Se pone de pie y deja caer sus pantalones mientras lleno la bañera y le echo el jabón.

-Mírate...tan valiente. Has cambiado tanto honey...- ¿Es de esos que se ponen sentimentales cuando se emborrachan?. ¡Dios no!. ¡Qué vergüenza!.- Estoy tan orgulloso de ti...

-No puedo decir lo mismo.- Suelta una sonrisa amarga y asiente.

Pero entonces me doy cuenta de que tiene razón por muchas razones. ¿Desde cuando he llevado yo la contraria a mi madre o la he desobedecido en algo?. Desde que conocí a Zayn. ¿Desde cuándo me he enterado de toda la verdad porque he obligado a que me la cuenten?. Cuando conocí a Zayn. Y ahora me encuentro con Zayn desnudo, excepto por los calzoncillos, en frente de mí y no siento vergüenza.

-¿Me quito esto?.- Pregunta mirándome.

-Pues...no lo sé.

-Puedo dejarlo si quieres.- Pienso, pienso y pienso.

-Quítatelo. A saber cuantos días llevas con ellos.- Me doy la vuelta para que se los quite y cuando estoy segura de que se ha sentado en la bañera y que la espuma tapa todo lo que tiene que tapar me doy la vuelta. No tengo verguenza, pero sí respeto. Cojo el champú, me echo un poco en la mano y le lavo el pelo con delicadeza mientras le hago un pequeño masaje en la cabeza.

-Honey...

-Cierra los ojos.- Lo hace y le quito la espuma pasándole el grifo por la cabeza.

-Becca.- Cojo el gel y se lo echo en la esponja.

-Dime.

-¿Puedes afeitarme?. Por favor, aféitame.

-Primero la esponja.- Una vez que se ha pasado la esponja con el gel por el cuerpo y se puesto la toalla alrededor de la cintura le ayudo a salir de la bañera y se vuelve a sentar en la taza del váter. Cojo otra toalla y con cuidado se la paso por la cabeza, cuando la aparto le pillo mirándome.- ¿Qué?.

-Eres tan guapa...

-Me estás dando miedo.- Rebusco en los cajones hasta que doy con la maquinilla. Suelta una carcajada ronca. Me pongo de cuclillas para afeitarle, pero él me levanta y hace que me siente en su regazo.

-Becca.

-Zayn prométemelo. Prométeme que no vas a volver a desaparecer y a volver como has vuelto hoy.- Cierra los ojos.

-Te quiero.- Reprimo mis ganas de llorar cuando siento los ojos acuosos.

-Zayn.

-¿Y quién me promete a mí algo?. ¿Quién me promete que mis hermanas van a estar a salvo?.- Un nudo en la garganta se me forma en el estómago.- El amor es una basura. ¿Por qué mi madre está enamorada de mi padre?.- Me mantengo en silencio porque no sé qué decir.- ¿Quién me promete que mi padre va a dejar de beber como él dice?. Una puta denuncia por parte de mi hermana o mi madre y todo se arregla, ¿por qué no lo hacen, Becca?.- Aparto la máquina de afeitar y me tiro a abrazarle por el cuello, aunque aflojo un poco cuando me doy cuenta de que le hago daño.

-El amor es lo que tiene, Zayn.- Susurro mientras le acaricio la parte de atrás de la cabeza. El móvil me suena en el bolsillo. Es Liam.- Me tengo que ir...

-¿Por qué?.- Pero no me mires así,,,

-Porque Liam me está esperando abajo y tengo que terminar la maleta para mañana. Come algo y duerme. Mañana nos vemos.- Le dejo un casto beso en la mejilla y me voy sin que él ponga resistencia.

Liam me recoge en su coche y le cuento un poco por encima cómo ha ido con Zayn. Me despido de él cuando llegamos a mi casa y una vez dentro hago el mejor teatro hasta que mi madre está segura de que no he estado con Zayn ni con ninguno de sus amigos. Algo cansada por todo, termino la maleta, ceno algo ligero y me voy a la cama.

-Que sí, mamá. Os llamaré todas las noches y no me juntaré con ellos. Lo prometo.- De esta al infierno. Pero tener a las ocho de la mañana a tus padres en el estacionamiento viendo como te vas de viaje, mientras te dan el follón cansa mucho. Me agacho para quedar a la altura de Tommy, le voy a extrañar tanto todo estos días.

-Pórtate bien, y haz caso a papá y mamá.- Beso su mejilla.

-Tráeme un regalo Becca.- Se agarra a mi cuello y me abraza.

-¡Acuérdate de lo que me prometiste!.- Miro hacia ella. No para de ser una pesada con el tema de Zayn, solo espero que la tontería se le pase, si quiero estar con el, estaré. No por que mi madre quiera tener control de mi vida, yo voy a ceder.

Me siento al lado de Liam, más que nada para hacer el paripé mientras nos despedimos de nuestros padres. Una vez que el bus se ha puesto en marcha me levanto y es Alex la que ocupa el sitio al lado de Liam. Creo que los dos tienen mucho que hablar, aunque sé de librillo que él no le va a decir lo que siente por ella.

-Honey...- Me giro y miro hacia la parte de atrás del bus. Penúltimos asientos en el lado derecho. Allí sentado, con ganas colocadas en sus ojos. Me acerco hasta él.

-¿Y tu compañero de asiento?.- Se encoge de hombros.

-Niall está con Harry y Louis no sé dónde se habrá metido, así que no tengo. Siéntate conmigo.- Sin que lo tenga que volver a repetir me siento a su lado, él está en el lado de la ventana y yo al lado del pasillo, lo cual me gusta porque puedo vigilar a Liam y Alex.

-¿Qué tal la noche?.

-Bien.- Dice sin mucho entusiasmo, como si pasar malas noches fuera lo más normal del mundo para él.

-Pareces cansado.

-Estoy cansado.- Asiento.- ¿Qué quieres Becca?. Llevo casi una semana durmiendo tres horas al día.

-Porque tú has querido.- Vale, no debería haber dicho eso.

-Déjalo.- Vuelve la mirada hacia la ventana.- Zayn, he dicho que lo siento.

-Vale.- Me dice sin mirarme. Le cojo del mentón haciendo que gire la cabeza y me mire. Si empezamos así el viaje, no quiero saber cómo vamos a estar al tercer día de estar juntos.

-Perdóname.

-Dame un beso.- Mi sonrisa se ensancha y me lanzo a besar sus labios.

-¿Os lo vais a montar en el autocar?.- Zayn se separa de mí y yo miro de dónde proviene la voz. Niall nos mira en el hueco de adelante entre asiento y asiento con el ceño fruncido, pero a la vez riendo.

-Más quisieras imbécil.

-Hacía mucho que no te veía, Niall. ¿Qué tal?.- Niall saca la cabeza del hueco para ponerse de rodillas en el asiento y así poder verle mejor.

-Bien, a ver si llegamos a Londres y me ligo a alguna londinense.- De repente, otra cabeza a su lado aparece.

-Dicen que son muy sosas.- Harry me mira de reojo y yo aparto la mirada.

-¡Tú qué sabrás!. ¿Has estado alguna vez con una?.

-No, pero-

-Pues eso. A callar.- Desde ese momento cada uno vuelve a su sitio para discutir si las londinenses son sosas o no.

-¿Esto siempre es así?.- Le pregunto a Zayn medio riendo.

-Más o menos.- Pega su nariz en mi cuello y me huele.

-Zayn...- Me quejo.- No me huelas. No soy un animal.- Me mira sonriendo y después de darme un beso en los labios me dice.

-Ya le puedes ir diciendo a Alex que se busque otra habitación para dormir porque yo voy a dormir contigo.- Me pongo tensa. ¿Dormir con un chico?. ¿Dormir con Zayn?.

-No creo que los profesores te dejen.

-Oh Rebecca, claro que no dejan. Pero me da igual.

-Pero a mí no.- Frunce el ceño.

-¿No quieres dormir conmigo?.- ¿Quiero dormir con él?.

-No sé...yo no, bueno es que...

-Ey, honey.- Aparta un mecho de pelo de mi frente.- He dicho dormir. No vamos a hacer nada que no quieras.- Qué vergüenza, por favor...- Estás como un tomate.

-Ya imagino.- Se ríe con una carcajada y luego me abraza de lado.

-Lo vamos a pasar genial, ya verás.- No lo niego, pero voy a pasar este viaje más nerviosa que disfrutando. Lo veo.

Después de hablar un rato sobre lo que visitaremos, Zayn se duerme con su cabeza apoyado en mi hombro y sus dedos entrelazados con los míos. Miro a Liam y Alex que hablan, Liam está algo serio y Alex le explica algo. Ojalá que salga bien. Diviso a Louis, quien no quita la mirada de Niall y Harry, los cuales hablan de no sé qué de golf  y entonces sin pensarlo hago una cosa de la que no sé si me tendré que arrepentir. Me asomo por el hueco de los asiento y mirando a Niall le digo.

-Niall, ¿me puedes cambiar el sitio?.


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Hola chicas! ¿Qué tal?. Esperamos que todo genial. Aquí os dejamos otro capítulo, esperamos que os guste. Y bueno, os queríamos pedir que os manifestárais!! Porque sí, vemos que hay bastantes visitas, pero solo tenemos un par de comentarios por capítulo...y nos gustaría sabes vuestra opinión. Así que esperamos vuestros comentario!. Muchas gracias :)

martes, 16 de septiembre de 2014

Capítulo 39

La puerta da un portazo y después se escucha como alguien suelta maldiciones por la boca. Se me hiela la sangre, si es su padre no quiero estar aquí y si...es Zayn...sé que si es él cuando le vea la vida se me va a hundir en milésimas de segundo. Miro con nerviosismo a Kate quien mira a Trisha la cual cierra los ojos con fuerza y acto seguido sale de la cocina para ver de quien se trata. Idolatro a esta mujer, no se puede sufrir tanto y aún así seguir siendo tan buena persona, cariñosa con todo el mundo y con una fuerza monumental. En un acto reflejo me acerco a la hermana mayor de la familia y me da la mano intentando tranquilizarme. De hecho no sé en qué momento nos hemos puesto las dos de pie.

-No te asustes.- Me susurra. Se escucha un grito ahogado procedente de su madre y entonces Kate me mira con preocupación y tristeza.- No es mi padre.- Sin esperar un segundo más la suelto de la mano y salgo de la cocina en busca de Zayn. Llego a la puerta principal y entonces siento que la vida se me para.

Zayn apoyado en la puerta de la calle con los ojos cerrados y la mandíbula apretada, tan borracho que ni se tiene de pie aunque se encuentre apoyado. Pero ni eso ni que esté soltando improperios por la boca para que su madre lo deje tranquilo es lo que me impresiona. Lo que realmente me impresiona y me destroza por completo en el físico que trae, huele a alcohol y a tabaco de aquí a China, apuesto a que no se ha duchado en toda la semana y lo peor es que le han dado una paliza. Y sea quien haya sido, lo ha hecho con maldad porque la raja que tiene en el mentón nadie lo hace con las manos. Eso ha sido algún tipo de navaja. Tiene un ojo morado que le llega hasta el pómulo y un corte superficial en el labio.

-Zayn, hijo...- Susurra su madre antes de ponerse a llorar. Quiere ayudarle a llegar al salón para que se pueda tumbar pero este se niega aún con los ojos cerrados. Miro hacia atrás encontrándome con la mirada de Kate. Está muy enfadada y niega con la cabeza. Yo también estoy enfadada pero la tristeza me gana por goleada. ¿Cómo han podido hacerle algo así?. ¿Cómo él mismo se ha hecho algo así?.

-Hay que llevarle al hospital.- Comenta Kate. Zayn suelta un gruñido de negación.- ¿Tú te has visto eso?. ¡Lo tienes infectado!.- Zayn se remueve en el sitio.

-No voy a ir.- Su voz ronca y rasgada a causa del dolor, la bebida, el tabaco y el dolor me hacen querer llorar.- Y haz el puto favor de no gritar.- Sin esperarlo ninguna de las tres abre los ojos. Entonces me ve. Estoy a unos cinco pasos de él y ambos nos miramos a los ojos como si todo lo demás no existiese, me muero el labio inferior esperando a que me diga algo. Pero no lo hace, solo me mira y me mira. También siento a su madre y a su hermana como pasan la mirada de uno al otro y sé que después de esto su madre va a saber todo lo que pasa entre nosotros. Y no sé si eso es bueno o malo. Entonces empiezo a llorar en silencio y agacho la mirada a mis pies.

-Tal vez debería...- Quiero decir que tengo que irme. ¡Pero no puedo!. En vez de eso, ando hacia Zayn que aún no me ha quitado los ojos de encima. Su madre se hace a un lado y cuando llego a su altura lo abrazo, suelta un gemido de dolor.- Oh, lo siento, lo siento.- Me intento apartar pero es él ahora quien no me deja. Pasa mis brazos  con dificultad por mis espalda y se deja abrazar. Lloro desconsoladamente en el hueco de su cuello.- ¿Por qué me haces esto?.- Susurro entre sollozos.- ¿Por qué las haces esto?.- Me refiero a su madre y a sus hermanas.

-Has venido.- Me susurra en el oído con su voz ronca. Lloro aún más. Y entonces me doy cuenta de que estoy enamorada de él y que aunque no quiera no puedo remediarlo. Estoy enamorada de Zayn Malik y su dolor es mi dolor. Y en estos momentos es mucho.

-Sí, estoy aquí...- Soy muy consciente de que su madre y su hermana siguen detrás nuestra, pero en estos momentos no me importa nada más que él.

-Bien. Sigo enfadado contigo.

-Yo también.

Cuando tengo ya algo de fuerzas me separo de Zayn para poder mirar mejor su casa. Sé que ellas siguen ahí.  Se me corta la respiración de tan solo pensar que es lo que puede pensar Trisha de mí. Cuando tengo el valor para poder mirarla a la cara me giro y la mano de Zayn descansa en mi parte baja de la espalda. Kate me tiende un botiquín de primeros auxilios, yo lo cojo agradecida.

-Será mejor que subáis a tu habitación Zayn.- Dice Trisha.

Solamente asiente. Cuando paso a la altura de su madre ella me aprieta la mano y me hace entender con la mirada que me da su especie de aprobación.  Subimos las escaleras en silencio y cuando llegamos a su habitación él me abraza por la espalda y agarra mis manos con las suyas sobre mi estomago.

-Zayn….- Me cuesta no llorar.- No les hagas estas cosas.- Me aprieta contra él.- Por favor, aunque a ti no te lo parezca ellas sufren. - Cuando acabo la frase él me da la vuelta y me mira a los ojos, me acerca poco a poco a mi cara.- ¡Quieto vaquero! Si quieres un beso primero tendrás que ducharte, lavarte los dientes y esas cosas que hacen las personas normales.

Justo cuando él se va al baño decido mandarle un mensaje a Liam para que me cubra, quiero quedarme con él por lo menos una hora más, sé que en la excursión tendré todo el tiempo que quiera y sin tener que poder escusas para mi madre, pero aún así siento la necesidad de quedarme con él y cuidarlo porque sé que no va a hacer caso a su madre ni a su hermana.

“Liam, ¿te importa hacerme de tapadera? Estoy en casa de Zayn y sabes que mi madre me prohibió verlo… ¿Me pues venir a buscar en una hora? ¡Te quiero! “

“Si, sabes que no tengo ningún problema. Nos vemos en una hora”

lunes, 8 de septiembre de 2014

Capítulo 38.

-Yo...no sé...joder. ¡Eres mi mejor amiga!. Debí creerte y no cegarme por un tío que no vale la pena.

-Ven aquí.- Me acerco a ella y la doy un abrazo donde ella me responde al segundo.- No importa Alex de verdad. Lo importante es que somos amigas y siempre nos vamos a tener la una a la otra.- Asiente.

-Me he portado fatal, contigo y con Liam. ¡Con Liam, Becca!. Encima que estuvo conmigo en todo momento voy yo y mira...- Suspira.- Ojalá que esa zorra se pudra en Nueva York.- Río.

-¿Te lo ha contado Harry?.- Asiente.

-No sé de donde sacó la valentía pero me lo contó todo.

-A mí también. ¿Cómo crees que están ahora Louis y Harry?.

-No se hablan.- Eso me sorprende. Desde que tengo uso de razón siempre han sido los mejores amigos.- Digamos que el grupo se está disolviendo. Niall también se ha enterado y tampoco se junta con Louis y Zayn no sabe nada, según me dijo Harry está desaparecido. ¿Tú qué tal con él?.- Me encojo de hombros.

-Está desaparecido. Entonces...¿te hablas con Harry?.- Ladea la cabeza.

-Más o menos. No somos amigos pero hablamos de vez en cuando. Cuando me lo contó quise pegarle una paliza, de hecho lo intenté pero prácticamente me paró con una mano, pero luego vi que estaba arrepentido y sé lo que se siente porque yo también la había cagado con vosotros así que le intenté comprender y más o menos lo hice.

-¿Sí?.- No me lo puedo creer. Asiente.

-Es un amigo genial. Quiero decir nadie haría eso por muy amigo que fuese excepto él. Él lo hizo sin dudarlo aunque tuvo que arrasar con otras personas no se lo pensó lo más mínimo.- Ahora recuerdo cuando me dijo que no se podía confiar en nadie, ni en uno mismo. Qué razón tenía...- Dice que te echa de menos.- ¿Qué?. Me encojo de hombros intentado aparentar que no me importa, pero lo cierto es que sí me importa.

-Que se lo hubiese pensado antes.

-Sabes que le vas a perdonar.- Intenta reprimir una sonrisa.

-No lo sé. Bueno, te veo mañana que aún tengo que seguir repartiendo esto.- Asiente, me da un abrazo y se mete para dentro.

Sigo repartiendo los dichosos papeles por todas las casas hasta que me doy cuenta de que mis pies han llegado a la calle de la casa de Zayn y que solo me queda por entregárselo a él. Sin saber porque he dejado su calle para el final, como esperando a que vayamos a hablar o que me vaya a perdonar o yo que sé el qué. Bajo la calle hasta el número de su casa y me detengo en su puerta. Sé que todos están en casa, más que nada porque me acabo de patear todo el pueblo de casa en casa y no los he visto. Estoy asustada y a la misma vez impaciente, pero sin pensármelo más de la cuenta toco el timbre y espero a que abran la puerta. Ni siquiera sé quien quiero que me abra la puerta sé que Zayn va a estar enfadado, si veo a su madre se me va a caer el alma, si veo a su hermana me va a llenar de preguntas y lo que si sé es que no me abra su padre. Eso seguro.

-Hola Becca.- Subo la cabeza para saludar pero la tengo que volver a bajar.- Mi hermano no está.- Niega con la cabeza.- Mamá me ha dicho que va a venir pronto. ¿Tú le has visto?.

-Eh...hola Abby...Emm...bueno no...- Me coge de la mano y me hace entrar en su casa. Me intento soltar de su mano para volver a salir pero me es imposible.- Espera Abby no...

-Que sí, ven.- Me dejo guiar, pasamos la entrada y llegamos hasta la cocina después de andar por un pasillo.- Mira mamá.- Mierda. En la cocina se encuentra su madre y su hermana sentadas en la mesa mientras toman té y hasta que he llegado yo hablaban sobre algo que parece tenerlas preocupadas.

-H-hola.- Susurro.

-Rebecca.- Saluda Kate.- Ven, siéntate. ¿Cómo estás?. Mamá, ¿te acuerdas de Becca?.- Su madre me sonríe con cariño.

-Claro que me acuerdo. Esa sonrisa y esos ojos no se olvidan fácilmente.- Sonrío agradecida.-¿Quieres un poco de té?.- Di que no Becca. Zayn te va a matar y tu madre ya ni te cuento.

-Me encantaría.- Y como si estuviera allí cada día tomo asiento en la mesa con ella. Cuando me giro Abby ha desaparecido. Trisha se levanta a echarme el té y Kate me sonríe.

-No esperes encontrar a esa pequeña princesa, se busca unos escondites muy hábiles.- No sé si eso lo hace para jugar o por el contrario quiere esconderse de algo o alguien. Su madre vuelve, me da la taza de té y se sienta con nosotras.

-¿Qué tal todo?. ¡Hace tanto que no hablo con tu madre!.- No me la mientes que me pongo mala...

-Todo va bien. Con ganas de irme ya mañana.- Asiente y después hay silencio por unos minutos. Decido romperlo.- He traído esto.- Saco la carpetita y se la doy a Trisha.- Es el itinerario que vamos a tener, donde puedes contactar con tu hijo y todo eso.

-Mira mamá, te podrían dar uno de esos para el día a día.- Ouh...

-Kate por favor.

-¿Va todo bien con Zayn?.- Tengo una cara más dura...

-Sí.- Asiente Trisha.

-No. Mamá no la mientas. No va bien, Becca. Se va a las siete de la mañana y no vuelve hasta las tres de la madrugada, hace lo que quiere, no va a clase, no estudia, no habla. Solo sabe hablarnos mal, meterse en peleas, beber alcohol y espera a que no tome drogas.

-¡Kate Malik!.- Siento que tengo la piel de gallina y me he ido encogiendo en el asiento cada vez que ha dicho algo de lo que hace.- Becca hija, ¿tú le has visto?.- Niego con la cabeza.

-El último día que hablé con él fue el viernes...- Ambas suspiran.

-Al menos ahora sabemos que hasta el viernes ha estado vivo.- Su madre no está contenta con ese comentario pero asiente dando la razón a Kate.

-Llevamos sin verle desde el domingo pasado.- Llevan más de una semana sin ver a Zayn...- ¿Cómo lo viste?.- Quiero decir que lo vi genial, que hablamos y que estuvimos como siempre. Como siempre que él está bien. Pero no puedo mentir.

-Se presentó a clase, pero la profesora no le dejó pasar así que salí para hablar con él, pero se fue porque está enfadado conmigo.- Me ahorro que mi madre me ha castigado sin verlo.

-Eso ocurrió el viernes pasado...- Susurra su hermana. ¿Ocurrió el qué?. Eso pasó el viernes pasado, mi madre me castigó el miércoles es decir, que lo que le pasó fue dos días después y luego desapareció hasta que le volví a ver el próximo viernes que volvió a desperecer hasta hoy domingo. Madre mía, Zayn, ¿dónde estás?.

viernes, 22 de agosto de 2014

Capítulo 37.

Literalmente se puede decir que pasé la tarde y la noche llorando en la cama. Mi madre me preguntó como cuarenta veces que qué me ocurría y con las mismas le dije que estaba sensible porque me tenía que venir la regla, no quería darla ninguna explicación sabiendo cómo se iba a poner. Hablé un rato por la noche con Liam explicándole lo que me había pasado y finalmente le reconocí que me gusta Zayn y mucho; él en ningún momento me dijo nada malo respecto a eso y me animó en lo que pudo diciéndome que mañana me invitaba a un trozo de tarta de mi pastelería favorita, lo que por un momento me hizo sonreír. A la media hora de haberme acostado, aún con lagrimones en los ojos,Tommy y Church se suben a mi cama. Mi hermano se acurruca a mi lado sin decir nada y el gato se pone a mis pies.

Esa misma noche tengo de nuevo otra de mis pesadillas. ¡No me lo puedo creer!. Esto ya estaba más que superado, ¿qué me pasa?. Veo a Zayn alejarse y cuando le sigo para decirle que me espera, que le quiero y que me voy con él, no puedo moverme, las piernas me pesan y me siento como si estuviese flotando. Cuando quiero recurrir a gritarle mi voz no sale, no tengo nada de fuerzas y lo único que hago es llorar. Eso sí. Eso se me da de vicio. Me levanto de un golpe, con lágrimas en los ojos como no, pero esta vez no grito al levantarme ya que tengo la garganta seca y la voz no me sale. Me levanto de la cama y miro el reloj antes de bajar a la cocina. Las cuatro y diez. ¡Menuda nochecita me espera!.

El sábado amanece helando, se nota que la Navidad está a la vuelta de la esquina y antes de salir de casa con Liam, me tengo que enfundar en mi abrigo, guantes y gorro. Por el camino a la cafetería vamos sin hablar, Liam sabe perfectamente que por mi cara no he pasado muy buena noche y que no quiero hablar hasta que lleguemos así que entrelaza sus dedos con los míos y andamos hacia el local. Me alegro que Liam y yo estemos como siempre de nuevo, le he echado mucho de menos y lo necesito en mi vida.

-¿Otra vez?.- Asiento. Le doy un sorbo a mi café y lo miro.

-Es por lo que te conté anoche. ¿Cómo puedo ser tan dependiente de una persona como Zayn?.

-Se llama estar enamorada.- Intento reírme.

-Entiendo por qué está enfadado, pero él tampoco me ha dejado que se lo explique.

-¿Qué le habrá pasado?.- Me encojo de hombros.

-Creo que es un problema con su padre, pero no sé nada.

-¿Preparada para Londres?.- Sonrío.

-La verdad es que lo necesito. Necesito salir de este pueblo y sentirme libre y yo misma por unos días.

-Sí, creo que a todos nos sentirá bastante bien este viaje.- Como si supiesemos que está allí, ambos miramos por la ventana de la cafetería cuando nos encontramos a Alex mirando el escaparate de la calle de en frente. Miro a Liam queriendo saber lo que piensa, pero él no me mira a mí, solo tiene vista para ella.

-Se la ve feliz, ¿no crees?.- Asiente sin dejar de mirarla.

-¿No deberías hablar con ella?. Tenéis varias cosas que arreglar.

-Sí, pero ahora no. Tal vez más adelante.

El resto del fin de semana lo paso haciendo la maleta y preparando todo para los trabajos que tengamos que hacer allí. Prefiero ir un poco informada sobre lo que vamos a ver para no llegar allí tan perdida. Aunque más perdida estoy con la maleta, como no sé qué meter, arraso con casi todo lo que tengo en el armario aunque luego no vaya ni a usar la mitad. Por meter, meto hasta maquillaje que creo que lo he usado tres veces en mi vida. El domingo después de comer cuando estoy ayudando a mi madre a recoger la cocina vuelve a la carga con el tema de Zayn.

-No te voy a poder vigilar en Londres.

-Tampoco es que vaya a ir por ahí como una cualquiera.- Estos temas me sientan bastante mal. Jamás le he dado a mis padres razones para que desconfíen de mí.

-Espero que no hagas tonterías con Malik o alguno de sus amigos.- Asiento. No voy a hablar sobre ellos.

-¿Sabes si la hija de la que vive encima de la tienda de decoración va al viaje?.

-¿Valerie?.- Esa misma.

-No sé cómo se llama.- Miento.

-No va, hablé con su madre el otro día. Están muy ocupados con la mudanza. ¿Sabías que se mudan a Nueva York?.

-No tenía ni idea.- Suelta lo que está haciendo, se acerca a un cajón donde guarda una carpeta y me dice.

-Se me había olvidado, eres la responsable de repartir esto por todas las casas de tus compañeros.- ¿Eing?. Lo cojo.

-¿Qué es?.

-La información de donde vais a estar, donde os podemos localizar, cuenta bancaria por si tenemos que ingresaros dinero...

-¿Y por qué no nos lo han dado en clase?.

-Porque tuvieron un problema con el alojamiento y hasta ayer no quedó solucionado. Tu padre fue el que se encargó de recogerlo.

-¿No será que tú le obligaste?.

-Se lo pedí por favor.- Mi madre siempre queriendo llamar la atención.- Y déjate de hablar que tienes que entregarlo ya y terminar la maleta. Y una cosa te voy a decir, cuando llegues a casa de la familia de Zayn se lo das a su madre en la puerta y te vas.

-Van a pensar que soy una mal educada mamá.

-No me importa lo que piense esa familia. Ellos tienen bastante más que esconder que nosotros.- ¡Pero bueno!.

-¿Por qué si se puede saber?.

-¡Oh por favor!. Su padre siempre en el bar metido, su madre trabaja limpiando, una hija que sabe los problemas de todo el mundo y un hijo asesino y delincuente. ¡La familia perfecta!.

-¡Mamá basta ya!.- Frunce el ceño.- Nadie es perfecto. Tú no eres perfecta, ni mucho menos. Así que deja de menospreciar a la gente y menos si no conoces como son. Eso solo son rumores. Me voy, que me queda mucho pueblo por recorrerme.- Cojo la carpeta, el abrigo y salgo de casa de mal humor.

Me paseo de casa en casa para dar los malditos papeles a todas las familias. Casi siempre me abren las madres así que la cosa es corta, cosa que prefiero porque hace un frío de nieve y mi humor no está para mucha charla. Cuando llego a casa de Harry me abre su madre, pero Harry veo a Harry bajar las escaleras y cuando veo que va a venir a hablarme me escabullo diciéndole a su madre que aún me quedan muchos por entregar. En casa de Liam me abre mi amigo y me dice que si quiero que me acompañe pero le digo que no se preocupe y después de mucho insistir consigo que se quede en su casa. Lo peor que cuando llego a casa de Alex, me abre su madre pero no debe saber nada porque hace a Alex bajar a verme y desaparece sin
que le haya dado el papel. Cuando Alex me ve, ambas nos quedamos cortadas.

-Hola...

-Hola Bec.- No sé cómo lo hacemos pero ambas estamos ya con lágrimas en los ojos.- Lo sé todo...Dios lo siento, lo siento mucho yo...fui una estúpida...

-No Alex, tú no tienes la culpa

jueves, 24 de julio de 2014

Capítulo 36.

Lo veo bajar por la calle media hora después. Va con el abrigo abierto y con un gesto enfadado, ¿pues sabes qué Harry?. ¡Qué me da igual!. Me separo de Liam y mi hermano que juegan con las piedras del parque y llego hasta la altura de Harry. Sin decir nada, me coge del brazo y me sube por la calle por la que ha bajado. Me intento soltar pero me es imposible.

-¡Harry! ¡Harry suéltame!.- Hace caso omiso a mi petición y sigue su camino. Dos minutos andando calle arriba, abre su coche y hace que entre en el asiento del copiloto. Lo hago, no sé por qué, pero lo hago. Él toma el asiento del conductor y se me queda mirando.

-¿Qué sabes?.

-¿Qué sabes tú?.- Le pregunto de manera borde. Vuelve la vista hacia el frente y resoplando vuelve a exigir.

-Dime lo que sabes, Rebecca.

-Sé que tú sabes más de lo que me dijiste. Mucho más. No soy tonta, Harry. ¿Espías a Alex y Valerie?.- La mirada que me echa es aterradora. Me corta la respiración y sus ojos se dilatan. Suspira intentando relajarse.

-Louis es mi amigo. Mi mejor amigo.- Muy bien, ¿y?.

-Y Alex era mi mejor amiga.

-Si Louis me pide que le ayude lo voy a hacer siempre. No lo olvides.- Analizo todo. ¿Qué me está queriendo decir?. No entiendo absolutamente nada.- Ya sabes que Alex quería algo más serio con Louis.- Asiento.- En cualquier caso, ¿quién en su sano juicio cree que puede tener una relación con Louis?.

-Alex.- Reconozco.- Solo ella puede pensarlo.- Asiente.

-Yo sabía perfectamente que si juntaba a otra chica con Louis, Alex se enfadaría.- ¡No puede ser!.

-¡Tú juntaste a Valerie con Louis y te aseguraste de que Alex lo viese!.- Baja la cabeza y asiente.- ¿Por qué me cuentas todo esto?.

-Porque Becca, desde el último día que estuvimos juntos he cambiado mi visión hacia ti.- Oh señor... Respiro. Vuelvo a respirar. Pero la rabia me puede, me come por dentro y tirándome encima de él como una histérica comienzo a golpearle.

-¡Eres un imbécil!. ¡Me has mentido todo este tiempo y ahora vienes y me dices esto!. Tienes muy poca vergüenza, Harry y esto no te lo voy a perdonar en la vida.- Vuelvo a mi sitio y me cruzo de brazos. Él ni siquiera se ha intentado defender, tampoco es que tenga una súper fuerza, pero no sé...

-Lo sé. Al menos, déjame que te termine de contar la historia.

-Si me vas a volver a mentir, paso.- Frunce el ceño y niega con la cabeza.

-No más mentiras.- Suspira.- Sé que no sirve de escusa, pero no todo es mi culpa. Valerie hizo un trato conmigo. Becca, Valerie empezó esto, lo de los mensajes desde el principio era ella, nadie tenía nada que ver. Valerie lleva enamorada de Zayn desde que...

-Sí, me sé la historia.- Asiente.

-Cuando Louis ya se quería deshacer de Alex me pidió que buscase alguna chica para enrollarse con ella, que Alex lo viese y que le dejase, ahí fue donde encontré a Valerie e hicimos el trato, ella quería hacerte daño por medio de la gente que quieres así que aceptó encantada, se enrolló con Louis y yo mandé un mensaje a Alex para que fuera allí y lo viese. Después Valerie quedó con Alex para decirle que tú le habías dicho que tenía vía libre con Louis y aprovechó para esconderla en el bolso el móvil que utilizaba para los mensajes, para que cuando llamaras lo cogiera ella.- Palabra por palabra analizo toda la situación. ¿Cómo la gente puede jugar de esta manera? y, ¿por qué Alex creyó eso?.

-Sigo sin entender por qué me cuentas esto.- Entonces me acuerdo de algo.- ¿No llamaste a ningún hacker?.

-No, Becca. Cuando me pediste ayuda se lo conté a Valerie, ella cumplió su trato y yo tenía que cumplir el mío; todo me lo inventé. Bueno, todo no. Cuando empecé a hablar contigo, me dí cuenta de que debía parar. Tú no mereces esto, gata. Tú eres muy buena y no mereces que nadie te haga nada malo. He roto el trato con Valerie y he escuchado que en unos meses se muda a Nueva York.- Quiero creerle, quiero creer que todo lo que me ha contado y como me ha tratado es sincero. Que tal vez podamos ser amigos, pero no puedo.

-Ya no me vale, Harry. -abro la puerta del coche y cuando estoy fuera la cierro, el sale detrás mía y me agarra por el brazo.

-¿Alguna vez volveremos a ser amigos?.- Sus pupilas están dilatadas, y esta vez su agarre es más como una caricia.

-No lo sé Harry, entre tú y Valerie me habéis hecho la vida imposible.- Me giro y bajo la calle.

Mi cabeza ahora mismo no da crédito a todo lo que me ha contado Harry. Tengo que ordenar toda la información para poder pensar con claridad. Lo único que se ahora es que Alex no quiere saber nada de mi, Zayn aunque a veces quiera negarlo sé que esta enfadado conmigo por los indicios de amistad con Valerie, Harry me traicionó y Valerie casi hace que me vuelva loca con sus mensajes de amenazas. Por lo menos eso ahora ya se acabó.

El viernes llega y con ello las chicas de mi clase ya se empiezan a emocionar porque cada vez falta menos para el maldito viaje. Yo ya no quiero ir a ningún viaje, ni quiero hacer nada. Lo único bueno que me ha pasado es que con Liam vuelvo a estar como siempre y que finalmente los mensajes han cesado, bueno, al menos ahora sé lo que realmente pasó y aunque me duela decirlo es gracias a Harry. Como yo suponía Louis Tomlinson no es una buena persona. En la hora de lengua, antes del recreo, mientras que la profesora explica sintaxis con énfasis alguien llama a la puerta.

-Adelante.- La puerta se abre y deja ver a un Zayn ojeroso, malhumorado y con esa barba de cuatro días. El corazón se me encoge, ¿desde cuándo está así?. Estoy por levantarme e irme a llorar al baño, pero me trago mis sentimientos y me quedo en el sitio sin apartar la mirada de su cara.

-¿Puedo pasar?.- Su voz es ronca y sin energía alguna. Ha estado fumando y me arriesgo a decir que lo ha hecho de forma compulsiva.

-¿Tienes un justificante o una buena escusa?.- Resopla. Si yo fuese la profesora no me metería más o va a acabar mal.

-No. ¿Puedo pasar o qué?.- La profesora suelta la tiza en la mesa y se cruza de brazos.

-Pues mira, te iba a dejar pasar porque llevas un montón de clases de retraso, pero por ese comportamiento de pasota que tienes, no vas a entrar a mi clase. Si no te importa cierra la puerta.- Y la cierra, ¡vaya que si la cierra!. Hasta la pizarra tiembla cuando la cierra y alguna que otra chica pega un gritito. Segundos después me estoy levantando de la mesa y camino decidida a la puerta. Si me viera mi madre...-¿Se puede saber dónde va?.

-No  me encuentro bien. Necesito salir.- Y así, con todo mi ser salgo de la clase y cierro la puerta suavemente detrás de mí. Miro hacia ambos lados del pasillo y lo veo caminando hacia los baños. Por un momento ando hacia él, pero cuando mis ganas incrementan por segundos corro detrás de él. Justo es la puerta del baño, le agarro de brazo y tiro de él. Este sin esperarlo, se quita con un gesto brusco y cuando me mira frunce el ceño.

-¿Qué cojones haces?.- Quiero llorar.

-Zayn...- La voz me sale en forma de súplica.- ¿Dónde has estado?. He estado preocupada.- Suelta una risa irónica.

-Sí, se ha notado. El móvil no paraba de vibrar porque llamabas y te has presentado en casa. Gracias, ehh.- Ironiza. Si creía que habíamos dado tres pasos hacia delante, acabamos de dar seis hacia atrás.

-Lo sé, Zayn y créeme tengo una explicación. Déjame que te cuente...- Zayn niega con la cabeza y antes de entrar en el baño me dice.

-Déjalo Rebecca, ya no importa nada una puta mierda.



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 ¡Chachán!. Sí, estamos vivas. Pedimos perdón por todo el tiempo que llevamos sin subir, pero realmente nos ha sido muy difícil. Es lo que tiene el verano, que te vas, sales bueno ya sabéis. Esperamos que el capítulo os guste y aunque no es muy largo es un capítulo importante porque se cierra una puerta pero se abre otra. ¿Qué creéis que le ha pasado a Zayn?.
Esperamos vuestros comentarios y nos leemos pronto. Un besazo y muchas gracias :)

martes, 1 de julio de 2014

Capítulo 35.

-Rebecca.- Me reprende mi madre para que conteste.

-Sí...ehm...Solo me trajo a casa, ya sabes.- Echa el cuello hacia delante y frunce el ceño.

-Ese sinvergüenza te ha besado Rebecca. ¿Qué es lo que significa eso exactamente?.

-Nada mamá, no era lo que parecía, sólo somos amigos. De cualquier manera, ¿por qué lo llamas sinvergüenza?.

-Oh, ¡por favor!. Todo el mundo sabe qué tipos de chicos son él y sus amigos.- ¿Gente que me ayuda cuando mis amigos 'reales' me han dado la espalda?.- No sé cuántas veces ha repetido curso. Por no hablar que mató a una chica...- El corazón se me encoge.

-¡Él no ha matado a nadie!.

-No habrá que volver a las sesiones con la psicóloga, ¿o sí?.- La hermana de Zayn me dio el alta hace un par de días. Me dijo que si tengo algún problema puedo volver cuando sea, pero no lo voy a hacer porque me siento fuerte para hacer las cosas por mí misma.

-No lo conoces en absoluto...- Estoy muy furiosa con mi madre en este momento. Ella no sabe nada sobre Zayn y sus amigos, bueno puede que Louis no sea bueno a mi parecer pero los demás sí me agradan y estoy enamorada de Zayn.

-Tú tampoco.- Quiero protestar pero me para diciendo.- La próxima vez que te vea aunque sea mirar a esa gente te quedarás sin viaje a Londres, ¿he hablado lo suficientemente claro?.- Quiero ponerme a gritar como una histérica, pero pensándolo mejor si espero a irme a Londres, para lo que falta una semana, podré pasarlo con él y no necesitaré escuchar a mi madre.

-Como el agua. Me voy a la cama. Buenas noches.

Los tres días restantes de la semana son los peores que he pasado en toda mi vida. Mi padre tuvo la maravillosa idea de llevarme y recogerme del instituto, por si no faltaba con eso de camino a casa me hacía un interrogatorio sobre lo que había hecho durante todo el día. La mayoría de las cosas me las inventaba como que había pasado el día con Alex y Liam como siempre, había atendido mucho en clase y no había visto a Zayn. Esto último era verdad, no sabía nada de él, desde que me dejó en casa el miércoles por la noche no había vuelto a pisar el instituto y tristemente estaba casi segura de porqué era. Su padre. Quería ir a verle o llamarle pero solo lo podía hacer por la tarde y mi madre me tenía vigilada todo el tiempo. Me estaba muriendo por dentro.

El viernes por la tarde Tommy y yo decidimos salir un rato por el centro del pueblo, mientras me cuenta que Abby anda un poco triste y cuando se junta a ella para jugar dice que no la apetece y se marcha. Ha debido de pasar algo realmente grave. Cuando llegamos al parque, Tommy se va a jugar con la arena y yo me siento en el banco a leer. Al poco tiempo siento a alguien sentado a mi lado, miro a su dirección. ¡No me lo puedo creer!.

-Hola...

-Liam...- Susurro como si no pudiese ser real. Suelta una sonrisa leve.

-¿Podemos hablar?.- Asiento.

-Básicamente lo siento por todo. No he sido un buen amigo.- Supongo que por eso, por Zayn, por mi madre y por un cúmulo de todo ya estoy llorando. Me acaricia la espalda con cariño. Lo he echado mucho de menos.

-Lo siento también.- Niega con la cabeza.

-No debí comportarme así. Posicionarme de parte de Alex no fue bueno.

-¿Qué tal está?.- Encoge los hombros.

-Creí que tú lo sabías, yo he perdido la cuenta de todo el tiempo que hace que no la veo.- Oh...- Intenté hablar con ella pero no contesta mis llamadas. Ahora se junta con otra gente. Creo que los conoció en un bar. Se ha vuelto algo así como gótica...No estoy muy seguro la verdad.- Alex. Gótica. ¿Qué me queda por ver?.- La última vez que la vi estaba discutiendo con tu antigua amiga o lo que fuese.

-¿Valerie?.- Asiente.

-No logré escuchar nada. Pero ninguna parecía contenta. Lo raro fue que cuando seguí caminando calle abajo, vi a Harry parado en un coche. Parecía muy atento a la conversación.- ¿Harry?. ¿Qué me estoy perdiendo?.

-¿Hace cuanto?.

-No más de cuatro días.- Eso fue antes de la llamada. Yo pedí a Harry que me ayudara con los mensajes, que después resultaron ser de Alex. Pero, ¿por qué?. No sé porqué, pero pongo la mano en el fuego a que Harry sabe mucho más de lo que me ha contado.

-Liam, ¿me puedes hacer un favor?.- Asiente

-¿Puedes vigilar a mi hermano mientras yo hago una llamada?. Es importante.

Me separo de él, me alejo unos metros, desde donde estoy puedo tener a los dos vigilados. Saco mi móvil y busco su numero de teléfono, ahora el que me tiene que dar explicaciones aunque no quiera es él. Yo siempre soy muy buena, pero también una se cansa de que jueguen con ella.

-¿Si?.

-Harry, ¿qué tal?.- Digo fingiendo alegría.

-Me acabas de cortar el rollo con...Maya.- Marta oigo a lo lejos.- Eso, Marta.

-Vale, pues te jodes. Solo te lo voy a decir una vez, vas a traer tu culo al parque y me vas a contar todo. Y todo es ¡todo! Harry Styles. Aquí te espero.- Sin más cuelgo y vuelvo con Liam.

sábado, 28 de junio de 2014

Capítulo 34

-¿Qué es eso de que te ha ayudado?.- Me mira con cara de confusión y al mismo tiempo con rabia.

-No es nada malo, es mejor que nos marchemos y que hablemos en un lugar más seguro.- Le agarro de un brazo, pero él se zafa. Vamos, las cosas hoy empeorarán.- Bueno, gracias por todo Harry, pero creo que yo me voy.

Recojo mi chaqueta y mi mochila, si él no estaba dispuesto a hablar yo no iba a hacer nada, creo que es hora de que ceda un poco, no siempre voy a estar yo detrás de él. Las cosas no son así. Salgo del bar y me pongo mi chaqueta, la mochila al hombro y me rumbo a la parada más próxima. Un coche se para delante de la parada y baja la ventanilla.

-Guapa, ¿quieres que te lleve a algún lado?.- Un nombre de sobre unos 40 años me mira con cara de guarro. Lo que me faltaba hoy.

-No necesita que le lleven a ninguna parte.- Siento como su brazo me rodea la cadera, algo muy típico en un "macho" cuando quiere marcar su territorio. Vemos como el coche se aleja y lo mismo hago yo de él.-Vamos te llevo a casa.

-No gracias, iré en bus.- Me siento en la parada. Tiene que aprender a confiar en mi, no sé muy bien lo que tenemos, pero sin confianza no se va a ninguna parte.

-Becca, no quiero enfadarme, vamos en mi coche y hablemos.

Se acerca a mi lado y coge mi mochila para llevarla en una mano, la otra mano que tiene vacía me la tiende y a pesar de que estoy enfadada la agarro. En silencio y con las manos unidas caminamos hasta el coche, ninguno de los dos dice nada. Creo que sobran las palabras para saber que él esta molesto y yo esto enfadada. Abre la puerta del copiloto y subo. Guarda mi mochila en el maletero y después ocupa su sitio.

-¿Como me encontraste?.- Pregunto mientras él conduce mirando hacia la carretera con el gesto serio.

-No te estaba buscando.- Vale, se ha vuelto un imbécil porque sigue más que enfadado.

-¿Pues sabes qué?.

-¿Qué?.

-Que te jodan.- Sé que si lo hubiese dicho en otra ocasión, después me sentiría culpable, pero en este momento no lo hago. De hecho, me siento bien por decírselo.

-Ya sabes que a más de una le gustaría, Rebecca.- ¡Pero bueno!. Esto es la guerra.

-Pues ya estás tardando, Zayn. No te necesito.- Desvía el coche hacia un lado en mitad de una de las carreteras principales del pueblo, lo para y baja.- ¿Qué hace?.- Murmuro para mí. Zayn llega a mi altura y abriendo, me coge del brazo y hace que salga del coche. Vale, estoy asustada.- Zayn, suéltame.- Digo con
un hilo de voz. Ignorándome, cierra la puerta del coche y me estampa contra él.

-Dime que no me necesitas.- Silencio.- Vamos Rebbeca, dímelo.- Siento su aliento en la parte alta de mi cuello y su cuerpo completamente pegado al mío. Antes de decir nada le cojo la cabeza con ambas manos y lo acerco hasta que sus labios están pegados a los míos. A él no parece importarle, ya que me coge de la cintura y profundiza más el beso.

-No te necesito.- Le susurro con una pequeña sonrisa cuando se aleja unos centímetros de mí. Vuelve a pegar su frente a la mía.

-Bien. Pues yo sí.- Me da un leve beso en los labios y encaja sus dedos con los míos en ambas manos, cosa que me parece un detalle muy bonito. Sonrío.- ¿Qué pasa?.

-Nada. Que me gusta cuando eres así conmigo.- Sonríe de lado y esconde su cabeza en mi cuello aún con las manos entrelazadas.

-¿Así cómo?.

-Cariñoso, bueno, adorable...- Me da un beso en el cuello y le acaricio la cabeza.

-A mí me gusta cuando eres así.

-¿Cariñosa y adorable?.

-No. Traviesa y valiente.- Suelto una carcajada y me alejo de él.

-Zayn, estamos en medio de la carretera y hace un frío que pela. Vámonos...- Asiente y en menos de cuarenta segundos ya estamos de nuevo en el coche rumbo a mi casa.

-Aún me tienes que contar lo que ha pasado.- Me tenso en mi asiento.

-Lo voy a hacer, pero aún no. Dame tiempo para que yo misma lo asimile.- Asiente acariciándome la rodilla.

Cuando llego a casa, Zayn me acompaña hasta la puerta y nos despedimos con un beso. Cuando entro y voy a subir a cambiarme para bajar a cenar, me encuentro a mi madre en la entrada con los brazos en jarra y el ceño fruncido.

-¿Qué hacías con ese?.


miércoles, 18 de junio de 2014

Capítulo 33

De vuelta a casa en la moto de Harry, me abrazo fuertemente a él. Ni siquiera sé por qué lo hago, pero necesito a alguien en estos momento y como a él no parece importarle... Había confiado en ella, siempre habíamos estado la una para la otra o al menos eso creía yo. Que Alex me hiciese esto en estos momentos me partía el alma y no sabía como reaccionar. Quería odiarla, pero no podía hacerlo, ella sigue siendo mi amiga...

Me extraño cuando Harry en vez de parar en mi casa para en un bar, se baja de la moto y me ayuda a bajar a mí también.

-¿Qué hacemos aquí?.

-Ahogar nuestras mierdas.

-No voy a beber alcohol, Harry. Lo único que necesito ahora es esconderme debajo de las sábanas y no salir en años.

-¿Así es como pasáis los frikis los malos momentos?.- Frunce el ceño con una sonrisa.- Venga Becca, te va a venir bien.

-No lo creo.- Me coge de la mano y me mete dentro del local. El humo y el olor a bebida me inunda, no hay mucha gente ya que son las cinco de la tarde. Harry se sienta en la barra y le imito.

-Dos whiskys.- Le dice a la camarera acompañado de un guiño. Madre mía...

-Yo no sé cómo...- Levanta un dedo haciendo que pare de hablar.

-Comienza a hablar cuando bebas. Hazme caso.- Asiento no muy convencida. Una vez he bebido siento como la garganta me arde pero mi cerebro pide más. Y Harry no ayuda porque pide más.- Así que Alex. Y parecía tonta.

-No lo entiendo...

-Eres demasiado buena.- He escuchado eso antes en Zayn.- Esto te va a enseñar a que no confíes en nadie.

-¿Tú no confías en nadie?.- Niega con la cabeza antes de echarla hacia atrás para beber.- Creo que la confianza es importante.

-Y tanto que lo es, por eso es tan peligrosa. La gente no la valora.- Le doy la razón interiormente.- ¿Qué piensas hacer?.

-Supongo que hablar con ella.- Suelta una carcajada.

-¿En serio?.- Me señala.- Si yo fuera tú, la partiría la cara, verás que rápido se dejaba de tonterías.- Sí, podría ser...¡No!, yo no soy así. El alcohol hace que piense cosas que no están bien.

-Ella sabe un montón de cosas sobre mí...

-Si es un poco inteligente no lo contará, seguro que tú sabes muchas mierda sobre ella también.- Asiento.

-Cuando Liam sepa esto...- Liam...Lo necesito como a nadie ahora mismo, lo echo tanto de menos que en menos de cinco segundo me he puesto a llorar como una niña pequeña.

-Mierda Becca, se suponía que el alcohol no haría esto.- Me encojo de hombros.

-E-es que Li-Liam...- No puedo seguir hablando a causa de las lágrimas. El es mi mejor amigo y está enamorado de Alex, si él tiene que elegir y la elige a ella no podría soportarlo.

-Venga ya está.- Me toca ligeramente el hombro.- Me estás poniendo las cosas muy difíciles. Las chicas no se acercan a mí para llorar precisamente...- Me río levemente.- No sé qué tengo que hacer. ¿Una ayudita?.- Me sonríe.

-Un abrazo estaría bien...- Se echa el pelo hacia atrás.

-¡Oh señor!.- Acercándose poco a poco y algo inseguro me da un abrazo. No se sienten como los de Liam o Zayn, pero cuando abraza aprieta y eso me reconforta.- Imagina a Zayn viendo esto, me corta los huevos.- Si antes lo dice antes aparece. Zayn entra por la puerta y se queda inmóvil cuando me ve, Harry no puede verle porque está de espaldas a él. Le doy un toque en el hombro.- ¿Suficiente?.- Susurra.

-Suelta, suelta.- Harry me suelta rápidamente y se da la vuelta para mirar donde yo lo hago, cuando ve a Zayn susurra.

-Me cago en la puta.- Rápidamente me bajo de la silla de la barra y voy hacia él, cuando voy a cogerle la mano para hablarle la aparta y dice.

-Ni me toques.- En vez de pagarla conmigo mira a Harry.- ¿Qué clase de amigo se supone que eres tú?.

-Te relajas, ¿eh?. Más vale que la hubieses vigilado más de cerca. Si lo hubieras hecho, nada de esto estaría pasando.- Esto no va a acabar nada bien.

-¿De qué hablas?.- Desde la distancia niego a Harry para que no diga nada. Harry apreta los puños se que se está controlando de sobremanera.

-De nada.

-¿Estáis juntos?. ¿Te la has tirado capullo?.- ¿QUÉ?.

-No, no me la he tirado pero porque no he querido.- Sé que solo lo hace para fastidiarle porque está de mal humor.- Tú en cambio deberías hacerlo ya.

-Serás hijo de...- Se abalanza hacia él pero antes de que le pueda hacer nada me he puesto entre los dos de cara a Zayn quien me mira a los ojos.- Quítate Rebecca.

-Sí Rebecca, quítate a ver si se desfoga un poquito.- Bromea Harry, pero ninguno se lo toma a broma.

-Para, por favor.- Le susurro a Zayn.- No es nada de lo que imaginas.- Zayn me mira a los ojos.

-¿Has llorado?.- Bajo la vista y me agarra de la barbilla.- ¿Por qué has llorado?.

-Aquí no por favor...- Se entromete Harry.- Tenéis mucha calle para decir y hacer ñoñerías.

-¡Cállate!. ¿Qué la has hecho?.- Pregunta a Harry y luego pone los ojos en mí.- ¿Te ha forzado a algo?.- No entiendo nada, ¿no se supone que eran amigos?. ¿Qué clase de amistad es esta?.

-No me ha hecho nada malo, al revés me ha ayudado mucho.

sábado, 7 de junio de 2014

Capítulo 32.

-Mmm.. -murmuré mientras me estiraba.

Nos habíamos quedado a dormir en el sofá, no es que estuviera incomoda, ni mucho menos, pero es que me dolía la espalda de estar tanto tiempo en la misma posición. Me salí del amarre de Zayn y después de estar un rato contemplándolo dormir me fui a la cocina, ya que mis tripas rugían con ganas. No dejaba de darle vueltas a lo que me contó, pero yo sé que soy más fuerte que Christine, aunque a veces no lo parezca, puedo con muchas cosas. Ver como el se derrumbaba y lloraba se quedo dormido, seguro que hace tiempo que no dormía bien. Le había confesado que lo quería, y me dolió lo que me dijo, pero es la verdad. Aunque muchas veces nos queramos matar no se que podría hacer si el no estuviera a mi lado como lo esta.

-Hola -me giro y me encuentro con el, su pelo revuelto y cara de sueño, mis ganas de ir hacia el aumentan en 1000.

-Hola dormilón -se acerca a mi y deposita un beso en mi cabeza.

-¿Qué haces?

-Preparar unos sandwiches para comer algo, por que la verdad es que estoy muerta de hambre. ¿Quieres uno? -asiente con la cabeza mientas rebusca por la cocina donde estarán los vasos y coloca dos encima de la mesa después en la nevera coge una botella de agua.

-¿Qué piensas hacer después de que acabes bachiller? -me dice mientras le da un bocado a su sandwich.

-Tenia pensado estudiar música, me encanta el piano -dije ilusionada -pero, mis padres me obligan a hacer derecho.

-¿Piensas hacer lo que ellos te dicen? -levanta una deja y me mira raro.

-Es lo que me queda, como dice mi madre,  "Mi casa, mis reglas" -me sentía triste al hablar de esto, ya que no estudiaría algo que a mi me gusta de verdad, sino una cosa que me imponen como una orden.

-Sé lo que es eso, pero muchas veces tienes que alzar la voz para que te escuchen -me dice. Me encojo de hombros.

-Pocas veces soy capaz de hacer eso.

-Siento lo de ayer.- Susurra.- Soy un gilipollas.- Entorno los ojos y niego con la cabeza.

-No lo sientas, prefiero que me dejes las cosas claras y supongo que estar con alguien después de eso no es fácil.

-Ven aquí.- Tiene los brazos abiertos y está de pie esperando. Lo miro confusa.- Ven, honey.- Me acerco hasta él y me envuelve en un abrazo enterrando su cabeza en mi pelo.- Gracias...

-Ya sabes que estoy contigo. Siempre.

-¿Aunque sea un cabrón insensible?.

-Aunque lo fueras, estaría contigo.

Cuando terminamos de comer, Zayn se fue a su casa porque quería estar con su hermana y yo estuve estudiando para los exámenes de la semana hasta que llegaron mis padres y mi hermano y cenamos juntos.

La semana hasta el miércoles pasó a base de exámenes y más exámenes ya que quedaba una semana para el viaje a Londres y después vendrían las vacaciones de Navidad. En los recreos intentaba hablar con Alex quien pasaba la mayor parte del día con Liam pero no me contestaba y hacía como si no existiese. Liam intentó hablarme una vez en el descanso entre clase y clase pero aún me siento muy dolida como para estar con él como siempre. Y con Zayn no es que estemos mal, pero desde el fin de semana con él se ha distanciado un poco, sobre todo en el instituto. Aunque quiero pensar que es porque quiere pasar tiempo con sus amigos, sé que lo que en realidad pasa es que no quiere que lo vean conmigo, cosa que me duele, pero yo no voy a ir a decirle nada. Bastante le he dicho ya.

-Vamos a mantener esto como una conversación normal. Así que mantén un gesto neutral, no quiero más problemas de los que me estás causando ya.- Me dice el miércoles en el recreo Harry, quien se sienta conmigo en el banco donde estoy repasando mis apuntes de Lengua.

-Vale, dime.

-¿Han cesado los mensajes?.- Ni me acordaba ya de ellos.

-Pues ahora que lo dices, sí.

-Joder, pues menos mal, porque tuve que pagar a un hacker cien libras para que bloqueara los mensajes. Tu móvil.- De repente lo saca de su bolsillo trasero y me lo tiende. ¿Pero qué...- Te lo cogí prestado el lunes en la hora de la comida. Eres muy despistada, gatita.- Cojo el móvil de un manotazo.

-Me lo podrías haber pedido.- Se encoge de hombros.

-Lo que sea. Tengo el número desde donde se mandan los mensajes, lo que me ha costado treinta libras.

-¿De quién es el número?.

-Ahí está el misterio. Aún no he llamado, quería que hicieses los honores.

-No voy a llamar desde mi móvil.

-¿Qué piensas hacer entonces?.

-Después de clase iré a una cabina y llamaré.

-Gata inteligente...Espérame a la salida. Voy contigo. Por cierto, me debes ciento treinta dolares, pero como me caes bien, te lo rebajo a cien.

Las clases restantes hasta la salida se me hacen interminables. Miles de preguntas me pasan por la cabeza, ¿quién es?, ¿por qué lo hace? o, ¿qué es lo que quiere?. Una nota me cae en la mesa, miro hacía atrás donde Zayn me mira. Abro la nota.

''Te espero luego para ir juntos a casa''.

''No. Tengo algo que hacer''.

Aparte de que tengo cosas muy importantes que descubrir, también estoy algo molesta con él, yo no soy su muñeco y no podemos hablar cuando solamente él diga.

A la salida Harry me espera y aunque no muy convencida me monto en la parte detrás de su moto hasta llegar a una de las cabinas más cercanas. Cuando ya estoy marcando el número me paro por un momento. El corazón me va a mil, he estado esperando esto durante semanas y ahora me veo inmovilizada.

-¿Necesitas ayuda?.- Me pregunta Harry comprensivo.

-Esto es superior a mí.

-No. No lo es. Lo estás haciendo genial, puedes acabar con esto. Ya está acabado, Becca. Haz esa llamada, estoy contigo.

-Muchas gracias Harry.- Nos sonreímos levemente y marcando el último número pongo el teléfono entre Harry y yo para poder escuchar los dos. Después de tres pitidos, el teléfono es descolgado.

-¿Diga?.- Me tapo la boca con ambas manos y las lágrimas ya están recorriendo mis mejillas. Las piernas me flojean y me quiero morir literalmente.- ¿Hola?, ¿quién es?.- Harry cuelga el teléfono.

-Ya te tenemos hija de puta.- Me sostiene por la cadera y salimos de la cabina.- Salgamos de aquí, Becca.

lunes, 26 de mayo de 2014

Capítulo 31.

-¿Qué has dicho?.- Sigo entre sus piernas, tensa como un palo e intentando no mirar sus ojos.

-Que esa chica es Valerie.- Sin previo aviso me coge de los muslos y me pone en el otro lado del sofá. Se levanta y siento que quiere golpear algo, pero al darse cuenta de que no es su casa lo único que hace es dar vueltas alrededor del salón mientras se echa el flequillo hacia atrás. Así se pasa por los menos diez minutos hasta que decido hablar.- ¿No vas a decir nada?.

-¿Sirve que diga algo?.- Dice calmado, pero yo sé que en realidad no lo está y se está conteniendo por hacer una locura. Apreta los puños y mira a un punto fijo. En 3...,2... y aquí vamos. -¡¿Estás loca?!. ¡Te lo advertí Rebecca!. ¡No será porque no te lo dije!. ¡Si te digo que no te juntes con ella es por algo, joder!. Tu inocencia está bien hasta un límite, pero aquí es cuando hacen lo que quieran contigo.

-Yo...creí...

-¡No me hables porque ahora mismo no quiero escucharte!.- Me hundo en el sofá. Quiero llorar, y esta vez si es de pura pena, pero no le voy a dar el gusto.- ¡Yo no te voy a ayudar, que te quede claro!. Esto lo vas a arreglar tú sola.- Lo único que se me ocurre hacer es lo que minutos antes he echo con Liam. Me levanto y abro la puerta señalando hacia el exterior.

-Quiero que te vayas.

-Estás que sí.- Me dice aún enfurecido.

-¡Fuera de aquí!. No tienes ningún derecho a tratarme como lo acabas de hacer.- Se acerca hasta llegar a mi altura y me sonríe.

-No me voy a ir de aquí y lo sabes.

-¿Y qué se supone que vienes a hacer?.

-Esto.- Sin decir más se estampa sus labios sobre mí. Cierra la puerta con su mano y me apoya en ella sin dejar de besarme, es un beso rápido. Un beso enfurecido.Me agarra de la cintura y me pega más contra él, yo le paso mis manos a cada lado del mentón haciendo profundizar más el beso. Finalmente, cuando tenemos que separarnos a causa de la respiración pega su frente a la mía con los ojos cerrados.- ¿Qué voy a hacer contigo, honey?.

-Cuéntame lo que pasa con esa chica...- Susurro.

-No quieres escucharlo Rebecca.- Aunque me dice mi nombre completo y eso nunca es buena señal, lo dice con tono suave.

-Sí, sí quiero Zayn...- Le cojo la cara entre mis manos haciendo que me mire a los ojos.- Confía en mí. Eres muy importante para mí, Zayn y necesito que me lo cuentes...

-Ven sentemos. Esto va para largo -¿Eso significaba que me lo va a contar? Nos sentamos en el sofá y espero impacientemente a que empiece.

-Hace tres años, cuando tenia diecisiete, conocí a una chica.

-¿Valerie?

-No, Christine. -Oh...- Era lo más bonito que había visto en mi vida, y me enamoré de ella. Por ese entonces, yo ya me juntaba con los chicos, pero por otro lado, me juntaba con gente que no me hacia bien. 

-¿Por qué lo hacías?

-Porque mi padre nos pegaba a hermana mayor y a mi, y no se me ocurría mejor manera de olvidarme de ello que bebe, fumar y pegarme con gente mayor que yo. Christine y yo empezamos a salir y pronto descubrí que era una persona muy insegura. Quise ayudarla y lo único que se me ocurrió fue meterla en mi mundo de mierda. Becca, la hundió hasta tal punto, que se suicido. -Un grito ahogado sale de mi boca, y me la tapo con ambas manos, él baja la mirada avergonzado y entristecido. -Antes de que eso ocurriera fuimos a un fiesta, donde conocimos a Valerie, ella es todo lo opuesto a vosotras, siempre tiene un plan y si ese no le funciona tiene un plan B y C, y bueno ya te sabes todas las letras del abecedario. 

Asiento.

-¿Ella iba detrás de ti? 

-No. Ella iba detrás de Christine, quería corromperla y lo tuvo fácil, ya que esa mañana, mi madre daba de comer a Abby y esta tiró el puré porque no lo quería, mi padre al verlo pegó por primera vez a mi madre. Cuando llegue a casa del instituto me encontré con Abby llorando, mi madre con un ojo morado, mi padre gritando por toda la casa y la comida acabó por el suelo. Así que cuando llegue a la fiesta, tarde muy poco en emborracharme. 

-Así que, ¿Valerie fue a por Christine? -Asiente -¿qué le hizo?

-La drogó durante toda la noche, le dijo que si hacia ese tipo de cosas yo la querría más, y al final de la noche se propaso con ella. 

-No, espera.. ¿qué?

-Harry llegó y la paro a tiempo, me llamo y nos llevamos de allí a Christine, casi inconsciente, fuimos a mi casa y cuando volvimos a la cocina donde la habíamos dejado....-Me mira a los ojos. Mierda, está llorando. Sin pesarlo un segundo me acerco a el y lo abrazo con todas mis fuerzas.

-Shhhh... -Se ve tan frágil y tan asustado.

-Cuando mi madre y mi hermana bajaron y lo vieron.- Se le contaba la voz, mi corazón latía rápido, tan solo imaginarme a Zayn llorando al lado de ella hacía que algo dentro de mí se rompiera. Ahora lloraba con más intensidad.

-Zayn ya está, no tienes por qué seguir hablando.- Le acaricio la espalda, y dejo que su cabeza se apoye en mi regazo. Con una mano en su espalda trazo círculos y la otra en la cabeza con la que juego con su pelo, sé que eso le relaja. Cuando por fin está más tranquilo se sienta mirando otra vez hacia mí.

-Becca, lo único que ellas me dijeron es que lo sentían mucho, pero que la acara de allí ya, porque no querían tener problemas con mi padre. Las quiero, pero eso me causó mucho dolor. En ese momento necesitaba que alguien me abrazara y me dijera que todo estaría bien, y nadie lo hizo. Bueno, Harry estaba allí y me ayudo y se lo agradeceré siempre, pero no era eso lo que necesitaba...- Me acerco a él y le abrazo, con mis manos acaricio la parte de atrás de su cabeza.

-Vale, tal vez no era esto lo que me esperaba escuchar. -Se aleja de mí- Eh, eh, no me lo esperaba, ¿vale?. Pero sigo aquí contigo, no me voy a ir a ninguna parte. Zayn yo creo...que...te quiero.

-No hagas esto ahora Becca, no puedo.

-Sí, está bien...lo siento...










sábado, 17 de mayo de 2014

Capítulo 30.

-No. No sé nada de lo que ha pasado.

-Pero...- Ando hasta el salón donde me siento en el sofá y Liam a mi lado.

-Mira Liam creo que me conoces suficientemente bien como para saber que no sé lo qué está pasando.

-Alex a visto a Louis con una chica.

- ¿Y qué tengo que ver yo con eso?.

- Ella me ha dicho que se estaba liando con tu nueva a amiga.

-¿Qué?.

-Eso es lo que me ha dicho, tiene una foto. Una tal Valerie.

-¡No es mi amiga!. Y aunque lo fuera, ¿qué culpa tengo yo?. Ella ya sabía como era Louis, ¡todos sabíamos que eso no iba a durar!.

-La historia que Alex me ha contado es que a Valerie le gustaba Louis y te lo dijo a ti, a ti como no te gusta Louis para Alex la dijiste a Valerie que Louis estaba soltero y que se lanzase a por él. Louis agobiado porque no quería nada serio con Alex y ella se lo pedía cada día, vio como vía de escape liarse con Valerie.

-¿Y yo tengo la culpa?.

-Según Valerie tú eres la culpable. Alex sabe la historia porque Valerie se la ha contado.

-¿Y tú te crees antes a Alex que a mí?.

-Becca...

-Contéstame.- Me pongo de pie. Siento un fuego interno que en la vida había sentido, la furia me invade y entrecierro mis ojos con maldad. ¿Quieren que sea mala?. Muy bien, allá vamos.

-Deberías haber visto a Alex, estaba llorando como nunca. Creo que deberías pedirla perdón. Sabes que te quiero pero...

-Claro, la prefieres a ella porque estás hasta el culo por ella. Es comprensible, dos tetas tiran más que dos carretas. Todos los tíos sois iguales, tú no ibas a ser menos.- Liam se levanta y anda hasta ponerse a mi lado. Cuando me va a abrazar me aparto.

-Mira, entiendo que estés enfadada.- Ya, claro.

-Vete de mi casa.- Abre los ojos de par en par y me mira.

-No vas en serio.

-Sal. Ahora.

-Becca, no sé que te está pasando últimamente pero intuyo que Zayn no te está haciendo ningún bien.- La gota que colma el vaso llega y tengo ganas de golpear a alguien o a algo. Me contengo por no soltarle un guantazo. Me acerco a la puerta con paso firme y la abro con un golpe que hace que Liam se estremezca.

-¡Piérdete de mi vista antes de que haga algo de lo que luego me tenga que arrepentir!.- Cuando Liam sale de casa mirándome de una manera indecisa cierro de un portazo.- ¡Aaaaaaaah!.- Intento sacar la rabia a base de gritar pero no funciona, subo corriendo a la habitación. He comenzado a llorar, pero no como las otras veces, esta vez no lloro de pena y no me siento culpable por nada, esta vez lloro porque estoy jodidamente enfadada y harta. Estoy muy harta. Sin saber siquiera lo que hago, me subo a la cama para llegar a la estantería y empiezo a romper todo lo que hay. Cojo una foto en la que estamos Liam, Alex y yo en el parque de atracciones y la estallo contra el suelo haciendo que los cristales se extiendan por el suelo de la habitación.El timbre suena, pienso en no abrir, pero luego pienso que puede ser algo importante y bajo aún con las lágrimas cayéndome de los ojos.

-Pero, ¿qué...

-¿Por qué has venido?.- Sollozo e intento cerrar la puerta, pero pone un pie y con las manos empuja la puerta para volver a abrirla.

- ¿Estás bien?.- Dejo de empujar la puerta y pasa. Vuelvo a llorar, esta vez de desesperación. Zayn se acerca a mí y me abraza haciendo que esconda mi cabeza en su pecho. - Nena...

-¡Ugh!.- Me aparto de él y sin motivo alguno le golpeo el pecho con los puños apretados hasta que me coge las muñecas y hace que lo mire.

-Suficiente.- Vuelvo a ponerme a llorar.

Sin separarme de su cuerpo me lleva hasta el salón, donde nos sentamos en el sofá. Busco refugio en su pecho, me siento en su regazo y me abrazo a él. Ahora mismo siento como la desesperación corre por mi venas junto con la rabia. No puedo creer que Liam y Alex me estén haciendo esto. Siento como si una parte de mí se estuviera rompiendo y todo por culpa de Valerie. Vamos, es que cuando la vea la pienso moler a palos.

-Nena, ¿que pasa?.- Acaricia mi espalda de arriba para abajo.

-Nada, déjalo...

-Así que nada te hace llorar. Bueno.- No dice nada más, apoya su mentón encima de mi cabeza y me deja que llore tranquilamente. No deja de acariciarme la espalda, y eso algo que me relaja y poco a poco voy dejando de llorar.- ¿Me lo cuentas ahora?

-Liam y Alex...- Retengo mis lagrimas.- que prefieren creer a otra menos a mí.

-Entonces, ¿ya hablaste con Alex? 

Me levanto de la posición en la que estaba y me siento en sus piernas. Las mías se cruzan por detrás de su espalda, para así poderle ver mejor la cara. Puedo notar como sus facciones están tensas. Apenas aparta los ojos de mí y estudia minuciosamente casa movimiento que hago, incluso el de respirar.

-No, Liam estuvo aquí.- Me hace un pequeño gesto con la cabeza para que siga hablando.- Me vino a decir que le tenía que pedir disculpas a Alex, y lo eché de casa.

-¿Porqué le tienes que pedir disculpas a Alex?

-Resulta que yo supuestamente de dije a una chica que Louis estaba soltero, porque según lo que parece no me gusta Louis para Alex, así que la chica esta se lió con Louis, ella misma se lo fue a contar a Alex, con pruebas y todo.- En su cara se podía notar confusión.- cosa que no es verdad, por eso ayer Alex llamé cuando estábamos cenando. 

-Y, ¿quién es esa chica? 

Sé que no lo puedo decir a Zayn que es Valerie, pero aun así, aunque se que me voy a ganar una merecida bronca se lo tengo que decir. Se que el me puede ayudar, por mucho que se enfade conmigo me ayudará, o eso espero, por que si no  es así entonces mi mundo se vendrá abajo por completo.

-Valerie...- Justo después de decir su nombre, sus ojos se vuelve más oscuros.



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Hola chicas, aquí os dejamos otro capítulo. Este capítulo está dedicado a @anaabeel1998 porque adivinó lo porque Alex está enfadada con Becca (es muy lista ella jajaja). Esperamos que os guste y que nos dejéis vuestra opinión en los comentarios o en Twitter. Muchas gracias y un beso ;)




sábado, 10 de mayo de 2014

Capítulo 29.

A la mañana siguiente me levanto cuando siento dos pesos en la cama, abro los ojos lentamente y veo a Tommy y a Church tumbados prácticamente encima de mí. Sonrío porque sé que pase lo que pase a ellos los voy a tener siempre y son dos seres muy importantes en mi día a día. Meto a Tommy entre las sábanas y dejo a Church encima de mi tripa encima de la colcha. Tommy me da un beso.

-Tienes cara de haber llorado.- Mierda, mi hermano me conoce mejor que ninguna otra persona aunque no llegue ni a las seis años.

-Alex se ha enfadado conmigo...- Frunce el ceño.

-Tú siempre dices que si tu quieres a una persona tienes que arreglarlo. ¡Habla con ella Becca!.

-Es lo que intento Tommy, pero no sé porque está enfadada.- Se pone de pie encima de la cama y con cara seria y los brazos cruzados en su pecho me dice.

-Ahora mismo vas a vestirte, a bajar a desayunar y hablar con tu mejor amiga.- Me río por dentro. Me está imitando, porque eso es lo que yo le digo siempre.

-Sí, papá.- Sonríe, coge a Church y ambos desaparecen de la habitación. Me levanto y voy hasta el armario para escoger la ropa, cuando voy a ir hacia el baño me llega un mensaje.

''Nos vemos a las doce y media.''

A las once y cuarto estoy duchada y vestida. Cuando bajo a la cocina mi madre está fregando los vasos del desayuno.

-Buenos días.

-Becca, ¡qué pronto estás lista hoy!.- Me preparo un vaso de leche.

-Tengo que salir a hacer unas cosas.

-Te quiero aquí a la hora de comer.- Asiento.- ¿Vas con Alex?.- Oh, no...

-Mmm...no, ella...ella tiene que hacer un trabajo.

-¿Con quién has quedado entonces?.- Me aclaro la garganta.

-Con gente que no conoces.- Me mira con el ceño fruncido. Rápido Becca di algo convincente.- También va Liam, me espera allí.- La cara y la espalda se le relaja y vuelve a lo que estaba haciendo. A mi madre nunca le ha gustado que salga con gente que no conoce, aunque eso es un poco imposible ya que aquí nos conocemos todo y eso creo que es aún peor, por eso no le he dicho a quién voy a ver. Si así fuera, no me dejaría salir de casa.

Una vez que he desayunado y me he lavado los dientes meto lo imprescindible en una mochila pequeña y me voy. Cuando llego él ya está allí sentado bebiéndose algo que apuesto que tiene alcohol, me siento a su lado y lo miro con algo de desprecio.

-Si has venido a mirarme con esa jeta me voy. Yo no te quiero para nada.- Tiene razón. Respiro y me relajo.

-Perdona. ¿Estás bebiendo alcohol?.- Mira a su bebida y acto seguido a mí.

-Es la una del mediodía. No soy un alcohólico, gatita.- Asiento.- Es coca-cola. Prueba si no me crees.- Niego con la cabeza.

-Te creo.- Miro hacia los lados para asegurarme de que nadie me va a escuchar.- Mira, Harry, necesito tu ayuda.- Creo que ve mi cara de preocupación y se compadece de mí porque por un momento siento que me empieza a hacer caso de verdad.

-¿No estarás metida en cosas de drogas o peleas?.

-No, no. Creo que es algo peor. Hay alguien...- Asiente para que continúe.- Alguien me está enviando mensajes. Mensajes de amenaza.

-¿Por qué?.

-Porque me junto con Zayn. Yo creo que ese alguien es una chica y está obsesionada con él. ¿Recuerdas los panfletos que salieron de Liam?.- Asiente serio. Realmente esto no le hace ninguna gracia.-Los hizo ella. Ahora no sé que le habrá dicho a Alex, pero no quiere ni verme.

-¿Qué necesitas que haga?.- Pregunta sincero.

-No lo sé, la verdad, no tengo ni idea. Quiero que esto acabe, necesitaba hablarlo con alguien y creí que tú me podrías ayudar. Ya sabes, conoces a mucha gente. ¿Tienes alguna idea de quien puede ser?.

-No lo sé, Rebecca. Hay cientos de chicas que querrían a Zayn en su cama. Dios, es como si Christine estuviera de vuelta...- Le miro esperando a que diga algo más sobre aquella misteriosa chica, pero nada. No dice nada de ella. Nadie dice nada de ella.- Voy a investigar y preguntar por ahí.- Se levanta, deja unas monedas encima de la mesa y antes de marcharse me dice.- Ya hablaremos.

La verdad es que me quedo desconcertada, me quedo con la intriga de saber que es lo que quería decir de Christine. Como no tenia nada más que hacer volví a mi casa, por lo menos hoy estaría sola, ya que mis padres junto con mi hermano se fueron a una excursión. Lo tengo todo planeado. Llegar a casa, comer, duchar y dormir. Nada más.

Mi plan se cumple hasta que sobre las cinco de la tarde Liam aparece en mi casa con una cara de enfado con la que pocas veces he visto. No sé qué el lo que ha pasado, pero no pienso callarme más. Ya estoy harta de tener que callarme todo el tiempo.

-No está bien lo que has hecho, Becca.

-¿Y qué se supone que he hecho?. Dímelo porque es que, ¡no lo sé!.- Liam abre la boca para decir algo, pero la vuelve a cerrar. Me cruzo de brazos esperando y cuando ve que realmente estoy enfadada frunce el ceño y me pregunta algo preocupado.

-¿De verdad no sabes lo que ha pasado?.



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Hola chicas, ¿qué tal?. Esperamos que todo os vaya genial. Bueno, lo primerísimo es que sentimos mucho por no haber subido antes, pero ya sabéis el rollo de siempre, clases, estudiar, etc. Esperamos que os guste el capítulo y gracias por estar ahí siempre comentando y leyendo porque es muy importante para nosotras. Intentaremos subir el próximo más pronto. Un besazo chicas :)


sábado, 26 de abril de 2014

Capítulo 28

-Alex, ¿estás bien?.

-¿Cómo puedes ser tan zorra?
.- Me grita llorando.


Mi respiración se corta, todo a mi lado deja de existir. Zayn me mira sin entender que es lo que está pasando. Aunque no es él solo el que no entiende qué es lo que pasa. 

-¿Alex qué pasa?.- Las palabras salen atropelladas de mi boca.

-¡Aún tienes la cara de preguntar! Dios,¿ pero como puede confiar en ti?, eres lo peor.- Más sollozos.

-Alex, no sé de lo que me estas hablando.- Mis nervios están a flor de piel. Zayn se levanta de la mesa dejando a la pequeña en compañía de Peter. Se acerca a mí y posa una mano en mi espalda.

-¿Que está pasando?.- Me dice en un susurro.

-No lo sé Zayn, no se lo que está pasando.- Me quedo en silencio.- ¿Alex estás ahí?.- Pero no obtengo ninguna respuesta, lo único que puedo escuchar es el "Pipipi" después de colgar. 

Me estaba empezando a encontrar mal, y lo peor de todo es que esta "cita" con Zayn no quería que acabase. Él me miraba a los ojos sin comprender mi cara de asombro y tristeza. Me picaban los ojos, se me estaban empezando a cristalizar. Me empujé levemente para poder zafarme de él, pero fue imposible. Se acerca más a mi, y con un gesto muy cuidadoso lleva mi cabeza hasta su pecho.

-Nena...¿Qué pasa, honey?.- Me susurra mientras continúa abrazándome.

-Y-yo ya no puedo más...- Sollozo. Quiero contarle lo de los mensajes, que hay alguien obsesionada con él, pero no me atrevo. Soy demasiado débil, y no quiero que más personas salgan heridas.

-Cuéntamelo.- Se separa lentamente y me mira a los ojos. Esta vez no tiene ningún rastro de seriedad, está preocupado. Preocupado por mí, lo que hace que tenga aún más ganas de llorar.- No llores, Becca. Espera aquí, coy a pagar a coger a Abby y nos vamos, ¿sí?.- Asiento, quitándome la lágrimas que me resbala por la mejilla.

Mientras que él hace lo que me ha dicho, saco el móvil para mandar un mensaje a Liam, pero no me contesta. Apuesto a que Alex le ha llamado para contarle, y a él le ha faltado tiempo para salir a su casa corriendo. Necesito contarle esto a alguien. Alguien que me pueda ayudar. Y sé quien lo puede hacer, aunque no me guste hacerlo.

''¿Podemos vernos mañana en la cafetería de la plaza?. No te lo pediría si no fuera importante.- Becca.''

-¿Lista?.- Me pregunta Zayn cuando vuelve a la mesa con Abby cogida de la mano. Asiento, cojo mi bolso y me levanto, cuando comienzo a andar siento como me coge de la mano y no me la suelta hasta llegar al coche.

El coche va en pleno silencio, Zayn de vez en cuando me mira de reojo y otras veces se escuchan mis sollozos. Instantes después de que yo suelte un quejido, Abby tose y pregunta.

-Becca, ¿estás llorando?.- Sorbo por la nariz y me limpio los ojos. Zayn frunce el ceño y mira a la pequeña por el retrovisor para reprenderla.

-.- Zayn pasa la vista a mí por un instante y me susurra ''basta''.

-¿Por qué?.- Zayn mirando a la carretera niega con la cabeza.

-Porque hay gente muy mala por el mundo.

-Mi hermano también dice eso siempre.- En otros momentos hubiera reído, pero este no era un momento para reír. No cuando tu mejor amiga quiere que esté enterrada bajo tierra por culpa de no se sabe quién.- ¿Te han roto el corazón?.- Zayn tensa la mandíbula y sin dejar de mirar al frente interviene en la conversación.

-Vale ya, Abby. No te metas en cosas de mayores.

-Pero...

-No, Abby.- Dice de manera cortante. Quiero decirle que no la hable así, que si le molesta que me hayas roto el corazón y que si realmente quiere enterarse de que me pasa. Pero las palabras no me salen. La niña se calla durante todo el viaje de vuelta hasta que el coche estaciona frente a mi casa.- Ahora vuelvo Abby. No te muevas de aquí.- Caminamos hasta llegar a la puerta de mi casa.- ¿Estarás bien sola?.- Asiento, aunque sinceramente no estoy muy convencida de ello.

-Gracias por la noche.- Niega de forma seria.

-No me imaginaba que ibas a acabar tan destrozada...Yo, mira, Becca.

-Te lo voy a contar, Zayn. Lo prometo. Pero no ahora, ahora no puedo. Es demasiado doloroso.- Asiente.

-Joder.- Refunfuña.

-¿Qué?.

-Que yo lo tenía todo preparado y no ha servido para nada. Lo he repetido cien veces en mi cabeza.- Me hace sacar una leve sonrisa.

-¿Qué venía ahora?

-Un beso. El beso.- Bajo la cabeza y me miro los pies avergonzada, la última vez que me besó fui una estúpida.- Mírame.- Cuando vuelvo la cabeza hacia él me susurra.- Voy a besarte.- Asiento.

Me mira a los ojos antes de besarme e instantes después nuestros labios se unen. Zayn me acaricia la mejilla antes de poner su mano en mi nuca y la otra en mi cintura. Cierro los ojos, hasta el momento abiertos y pongo mis manos en sus antebrazos. Mientras sigue recorriendo mi boca son la suya me acaricia la piel para relajarme, su olor a menta, a colonia y a tabaco me recorren los cinco sentidos. Lo quiero, pero no soy capaz de decírselo, y menos ahora. Zayn me recorre el labio inferior y finalmente se separa lentamente de mí jadeando.

-¿Estás bien?.- Asiento. Sigo en mi nube, pero estoy más que bien. Me acaricia el dorso de la mano y por último me dice.- Tengo que irme. Mañana te llamo.