domingo, 21 de septiembre de 2014

Capítulo 40.

Escucho un golpe sordo procedente del baño y literalmente corro a abrir la puerta para ver lo que ha pasado. Me encuentro con Zayn sentado en el suelo del baño intento con todas sus fuerzas quitarse la camiseta. Le miro con mala cara, ¿por qué se ha tenido que emborrachar?. ¡Joder ha impregnado todo el baño al olor horripilante del alcohol!.

-¿Tú te crees que esto es normal?.- Me agacho hasta él y le ayudo a levantarse para sentarlo en la taza del inodoro.- Levanta los brazos.- Hace lo que le mando y le quito la camiseta.

-¿Vas a bañarme?.- Pronuncia con voz ronca. Pongo los ojos en blanco sin que él me vea.

-¿Prefieres que llame a tu madre?.- Se pone de pie y deja caer sus pantalones mientras lleno la bañera y le echo el jabón.

-Mírate...tan valiente. Has cambiado tanto honey...- ¿Es de esos que se ponen sentimentales cuando se emborrachan?. ¡Dios no!. ¡Qué vergüenza!.- Estoy tan orgulloso de ti...

-No puedo decir lo mismo.- Suelta una sonrisa amarga y asiente.

Pero entonces me doy cuenta de que tiene razón por muchas razones. ¿Desde cuando he llevado yo la contraria a mi madre o la he desobedecido en algo?. Desde que conocí a Zayn. ¿Desde cuándo me he enterado de toda la verdad porque he obligado a que me la cuenten?. Cuando conocí a Zayn. Y ahora me encuentro con Zayn desnudo, excepto por los calzoncillos, en frente de mí y no siento vergüenza.

-¿Me quito esto?.- Pregunta mirándome.

-Pues...no lo sé.

-Puedo dejarlo si quieres.- Pienso, pienso y pienso.

-Quítatelo. A saber cuantos días llevas con ellos.- Me doy la vuelta para que se los quite y cuando estoy segura de que se ha sentado en la bañera y que la espuma tapa todo lo que tiene que tapar me doy la vuelta. No tengo verguenza, pero sí respeto. Cojo el champú, me echo un poco en la mano y le lavo el pelo con delicadeza mientras le hago un pequeño masaje en la cabeza.

-Honey...

-Cierra los ojos.- Lo hace y le quito la espuma pasándole el grifo por la cabeza.

-Becca.- Cojo el gel y se lo echo en la esponja.

-Dime.

-¿Puedes afeitarme?. Por favor, aféitame.

-Primero la esponja.- Una vez que se ha pasado la esponja con el gel por el cuerpo y se puesto la toalla alrededor de la cintura le ayudo a salir de la bañera y se vuelve a sentar en la taza del váter. Cojo otra toalla y con cuidado se la paso por la cabeza, cuando la aparto le pillo mirándome.- ¿Qué?.

-Eres tan guapa...

-Me estás dando miedo.- Rebusco en los cajones hasta que doy con la maquinilla. Suelta una carcajada ronca. Me pongo de cuclillas para afeitarle, pero él me levanta y hace que me siente en su regazo.

-Becca.

-Zayn prométemelo. Prométeme que no vas a volver a desaparecer y a volver como has vuelto hoy.- Cierra los ojos.

-Te quiero.- Reprimo mis ganas de llorar cuando siento los ojos acuosos.

-Zayn.

-¿Y quién me promete a mí algo?. ¿Quién me promete que mis hermanas van a estar a salvo?.- Un nudo en la garganta se me forma en el estómago.- El amor es una basura. ¿Por qué mi madre está enamorada de mi padre?.- Me mantengo en silencio porque no sé qué decir.- ¿Quién me promete que mi padre va a dejar de beber como él dice?. Una puta denuncia por parte de mi hermana o mi madre y todo se arregla, ¿por qué no lo hacen, Becca?.- Aparto la máquina de afeitar y me tiro a abrazarle por el cuello, aunque aflojo un poco cuando me doy cuenta de que le hago daño.

-El amor es lo que tiene, Zayn.- Susurro mientras le acaricio la parte de atrás de la cabeza. El móvil me suena en el bolsillo. Es Liam.- Me tengo que ir...

-¿Por qué?.- Pero no me mires así,,,

-Porque Liam me está esperando abajo y tengo que terminar la maleta para mañana. Come algo y duerme. Mañana nos vemos.- Le dejo un casto beso en la mejilla y me voy sin que él ponga resistencia.

Liam me recoge en su coche y le cuento un poco por encima cómo ha ido con Zayn. Me despido de él cuando llegamos a mi casa y una vez dentro hago el mejor teatro hasta que mi madre está segura de que no he estado con Zayn ni con ninguno de sus amigos. Algo cansada por todo, termino la maleta, ceno algo ligero y me voy a la cama.

-Que sí, mamá. Os llamaré todas las noches y no me juntaré con ellos. Lo prometo.- De esta al infierno. Pero tener a las ocho de la mañana a tus padres en el estacionamiento viendo como te vas de viaje, mientras te dan el follón cansa mucho. Me agacho para quedar a la altura de Tommy, le voy a extrañar tanto todo estos días.

-Pórtate bien, y haz caso a papá y mamá.- Beso su mejilla.

-Tráeme un regalo Becca.- Se agarra a mi cuello y me abraza.

-¡Acuérdate de lo que me prometiste!.- Miro hacia ella. No para de ser una pesada con el tema de Zayn, solo espero que la tontería se le pase, si quiero estar con el, estaré. No por que mi madre quiera tener control de mi vida, yo voy a ceder.

Me siento al lado de Liam, más que nada para hacer el paripé mientras nos despedimos de nuestros padres. Una vez que el bus se ha puesto en marcha me levanto y es Alex la que ocupa el sitio al lado de Liam. Creo que los dos tienen mucho que hablar, aunque sé de librillo que él no le va a decir lo que siente por ella.

-Honey...- Me giro y miro hacia la parte de atrás del bus. Penúltimos asientos en el lado derecho. Allí sentado, con ganas colocadas en sus ojos. Me acerco hasta él.

-¿Y tu compañero de asiento?.- Se encoge de hombros.

-Niall está con Harry y Louis no sé dónde se habrá metido, así que no tengo. Siéntate conmigo.- Sin que lo tenga que volver a repetir me siento a su lado, él está en el lado de la ventana y yo al lado del pasillo, lo cual me gusta porque puedo vigilar a Liam y Alex.

-¿Qué tal la noche?.

-Bien.- Dice sin mucho entusiasmo, como si pasar malas noches fuera lo más normal del mundo para él.

-Pareces cansado.

-Estoy cansado.- Asiento.- ¿Qué quieres Becca?. Llevo casi una semana durmiendo tres horas al día.

-Porque tú has querido.- Vale, no debería haber dicho eso.

-Déjalo.- Vuelve la mirada hacia la ventana.- Zayn, he dicho que lo siento.

-Vale.- Me dice sin mirarme. Le cojo del mentón haciendo que gire la cabeza y me mire. Si empezamos así el viaje, no quiero saber cómo vamos a estar al tercer día de estar juntos.

-Perdóname.

-Dame un beso.- Mi sonrisa se ensancha y me lanzo a besar sus labios.

-¿Os lo vais a montar en el autocar?.- Zayn se separa de mí y yo miro de dónde proviene la voz. Niall nos mira en el hueco de adelante entre asiento y asiento con el ceño fruncido, pero a la vez riendo.

-Más quisieras imbécil.

-Hacía mucho que no te veía, Niall. ¿Qué tal?.- Niall saca la cabeza del hueco para ponerse de rodillas en el asiento y así poder verle mejor.

-Bien, a ver si llegamos a Londres y me ligo a alguna londinense.- De repente, otra cabeza a su lado aparece.

-Dicen que son muy sosas.- Harry me mira de reojo y yo aparto la mirada.

-¡Tú qué sabrás!. ¿Has estado alguna vez con una?.

-No, pero-

-Pues eso. A callar.- Desde ese momento cada uno vuelve a su sitio para discutir si las londinenses son sosas o no.

-¿Esto siempre es así?.- Le pregunto a Zayn medio riendo.

-Más o menos.- Pega su nariz en mi cuello y me huele.

-Zayn...- Me quejo.- No me huelas. No soy un animal.- Me mira sonriendo y después de darme un beso en los labios me dice.

-Ya le puedes ir diciendo a Alex que se busque otra habitación para dormir porque yo voy a dormir contigo.- Me pongo tensa. ¿Dormir con un chico?. ¿Dormir con Zayn?.

-No creo que los profesores te dejen.

-Oh Rebecca, claro que no dejan. Pero me da igual.

-Pero a mí no.- Frunce el ceño.

-¿No quieres dormir conmigo?.- ¿Quiero dormir con él?.

-No sé...yo no, bueno es que...

-Ey, honey.- Aparta un mecho de pelo de mi frente.- He dicho dormir. No vamos a hacer nada que no quieras.- Qué vergüenza, por favor...- Estás como un tomate.

-Ya imagino.- Se ríe con una carcajada y luego me abraza de lado.

-Lo vamos a pasar genial, ya verás.- No lo niego, pero voy a pasar este viaje más nerviosa que disfrutando. Lo veo.

Después de hablar un rato sobre lo que visitaremos, Zayn se duerme con su cabeza apoyado en mi hombro y sus dedos entrelazados con los míos. Miro a Liam y Alex que hablan, Liam está algo serio y Alex le explica algo. Ojalá que salga bien. Diviso a Louis, quien no quita la mirada de Niall y Harry, los cuales hablan de no sé qué de golf  y entonces sin pensarlo hago una cosa de la que no sé si me tendré que arrepentir. Me asomo por el hueco de los asiento y mirando a Niall le digo.

-Niall, ¿me puedes cambiar el sitio?.


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Hola chicas! ¿Qué tal?. Esperamos que todo genial. Aquí os dejamos otro capítulo, esperamos que os guste. Y bueno, os queríamos pedir que os manifestárais!! Porque sí, vemos que hay bastantes visitas, pero solo tenemos un par de comentarios por capítulo...y nos gustaría sabes vuestra opinión. Así que esperamos vuestros comentario!. Muchas gracias :)

martes, 16 de septiembre de 2014

Capítulo 39

La puerta da un portazo y después se escucha como alguien suelta maldiciones por la boca. Se me hiela la sangre, si es su padre no quiero estar aquí y si...es Zayn...sé que si es él cuando le vea la vida se me va a hundir en milésimas de segundo. Miro con nerviosismo a Kate quien mira a Trisha la cual cierra los ojos con fuerza y acto seguido sale de la cocina para ver de quien se trata. Idolatro a esta mujer, no se puede sufrir tanto y aún así seguir siendo tan buena persona, cariñosa con todo el mundo y con una fuerza monumental. En un acto reflejo me acerco a la hermana mayor de la familia y me da la mano intentando tranquilizarme. De hecho no sé en qué momento nos hemos puesto las dos de pie.

-No te asustes.- Me susurra. Se escucha un grito ahogado procedente de su madre y entonces Kate me mira con preocupación y tristeza.- No es mi padre.- Sin esperar un segundo más la suelto de la mano y salgo de la cocina en busca de Zayn. Llego a la puerta principal y entonces siento que la vida se me para.

Zayn apoyado en la puerta de la calle con los ojos cerrados y la mandíbula apretada, tan borracho que ni se tiene de pie aunque se encuentre apoyado. Pero ni eso ni que esté soltando improperios por la boca para que su madre lo deje tranquilo es lo que me impresiona. Lo que realmente me impresiona y me destroza por completo en el físico que trae, huele a alcohol y a tabaco de aquí a China, apuesto a que no se ha duchado en toda la semana y lo peor es que le han dado una paliza. Y sea quien haya sido, lo ha hecho con maldad porque la raja que tiene en el mentón nadie lo hace con las manos. Eso ha sido algún tipo de navaja. Tiene un ojo morado que le llega hasta el pómulo y un corte superficial en el labio.

-Zayn, hijo...- Susurra su madre antes de ponerse a llorar. Quiere ayudarle a llegar al salón para que se pueda tumbar pero este se niega aún con los ojos cerrados. Miro hacia atrás encontrándome con la mirada de Kate. Está muy enfadada y niega con la cabeza. Yo también estoy enfadada pero la tristeza me gana por goleada. ¿Cómo han podido hacerle algo así?. ¿Cómo él mismo se ha hecho algo así?.

-Hay que llevarle al hospital.- Comenta Kate. Zayn suelta un gruñido de negación.- ¿Tú te has visto eso?. ¡Lo tienes infectado!.- Zayn se remueve en el sitio.

-No voy a ir.- Su voz ronca y rasgada a causa del dolor, la bebida, el tabaco y el dolor me hacen querer llorar.- Y haz el puto favor de no gritar.- Sin esperarlo ninguna de las tres abre los ojos. Entonces me ve. Estoy a unos cinco pasos de él y ambos nos miramos a los ojos como si todo lo demás no existiese, me muero el labio inferior esperando a que me diga algo. Pero no lo hace, solo me mira y me mira. También siento a su madre y a su hermana como pasan la mirada de uno al otro y sé que después de esto su madre va a saber todo lo que pasa entre nosotros. Y no sé si eso es bueno o malo. Entonces empiezo a llorar en silencio y agacho la mirada a mis pies.

-Tal vez debería...- Quiero decir que tengo que irme. ¡Pero no puedo!. En vez de eso, ando hacia Zayn que aún no me ha quitado los ojos de encima. Su madre se hace a un lado y cuando llego a su altura lo abrazo, suelta un gemido de dolor.- Oh, lo siento, lo siento.- Me intento apartar pero es él ahora quien no me deja. Pasa mis brazos  con dificultad por mis espalda y se deja abrazar. Lloro desconsoladamente en el hueco de su cuello.- ¿Por qué me haces esto?.- Susurro entre sollozos.- ¿Por qué las haces esto?.- Me refiero a su madre y a sus hermanas.

-Has venido.- Me susurra en el oído con su voz ronca. Lloro aún más. Y entonces me doy cuenta de que estoy enamorada de él y que aunque no quiera no puedo remediarlo. Estoy enamorada de Zayn Malik y su dolor es mi dolor. Y en estos momentos es mucho.

-Sí, estoy aquí...- Soy muy consciente de que su madre y su hermana siguen detrás nuestra, pero en estos momentos no me importa nada más que él.

-Bien. Sigo enfadado contigo.

-Yo también.

Cuando tengo ya algo de fuerzas me separo de Zayn para poder mirar mejor su casa. Sé que ellas siguen ahí.  Se me corta la respiración de tan solo pensar que es lo que puede pensar Trisha de mí. Cuando tengo el valor para poder mirarla a la cara me giro y la mano de Zayn descansa en mi parte baja de la espalda. Kate me tiende un botiquín de primeros auxilios, yo lo cojo agradecida.

-Será mejor que subáis a tu habitación Zayn.- Dice Trisha.

Solamente asiente. Cuando paso a la altura de su madre ella me aprieta la mano y me hace entender con la mirada que me da su especie de aprobación.  Subimos las escaleras en silencio y cuando llegamos a su habitación él me abraza por la espalda y agarra mis manos con las suyas sobre mi estomago.

-Zayn….- Me cuesta no llorar.- No les hagas estas cosas.- Me aprieta contra él.- Por favor, aunque a ti no te lo parezca ellas sufren. - Cuando acabo la frase él me da la vuelta y me mira a los ojos, me acerca poco a poco a mi cara.- ¡Quieto vaquero! Si quieres un beso primero tendrás que ducharte, lavarte los dientes y esas cosas que hacen las personas normales.

Justo cuando él se va al baño decido mandarle un mensaje a Liam para que me cubra, quiero quedarme con él por lo menos una hora más, sé que en la excursión tendré todo el tiempo que quiera y sin tener que poder escusas para mi madre, pero aún así siento la necesidad de quedarme con él y cuidarlo porque sé que no va a hacer caso a su madre ni a su hermana.

“Liam, ¿te importa hacerme de tapadera? Estoy en casa de Zayn y sabes que mi madre me prohibió verlo… ¿Me pues venir a buscar en una hora? ¡Te quiero! “

“Si, sabes que no tengo ningún problema. Nos vemos en una hora”

lunes, 8 de septiembre de 2014

Capítulo 38.

-Yo...no sé...joder. ¡Eres mi mejor amiga!. Debí creerte y no cegarme por un tío que no vale la pena.

-Ven aquí.- Me acerco a ella y la doy un abrazo donde ella me responde al segundo.- No importa Alex de verdad. Lo importante es que somos amigas y siempre nos vamos a tener la una a la otra.- Asiente.

-Me he portado fatal, contigo y con Liam. ¡Con Liam, Becca!. Encima que estuvo conmigo en todo momento voy yo y mira...- Suspira.- Ojalá que esa zorra se pudra en Nueva York.- Río.

-¿Te lo ha contado Harry?.- Asiente.

-No sé de donde sacó la valentía pero me lo contó todo.

-A mí también. ¿Cómo crees que están ahora Louis y Harry?.

-No se hablan.- Eso me sorprende. Desde que tengo uso de razón siempre han sido los mejores amigos.- Digamos que el grupo se está disolviendo. Niall también se ha enterado y tampoco se junta con Louis y Zayn no sabe nada, según me dijo Harry está desaparecido. ¿Tú qué tal con él?.- Me encojo de hombros.

-Está desaparecido. Entonces...¿te hablas con Harry?.- Ladea la cabeza.

-Más o menos. No somos amigos pero hablamos de vez en cuando. Cuando me lo contó quise pegarle una paliza, de hecho lo intenté pero prácticamente me paró con una mano, pero luego vi que estaba arrepentido y sé lo que se siente porque yo también la había cagado con vosotros así que le intenté comprender y más o menos lo hice.

-¿Sí?.- No me lo puedo creer. Asiente.

-Es un amigo genial. Quiero decir nadie haría eso por muy amigo que fuese excepto él. Él lo hizo sin dudarlo aunque tuvo que arrasar con otras personas no se lo pensó lo más mínimo.- Ahora recuerdo cuando me dijo que no se podía confiar en nadie, ni en uno mismo. Qué razón tenía...- Dice que te echa de menos.- ¿Qué?. Me encojo de hombros intentado aparentar que no me importa, pero lo cierto es que sí me importa.

-Que se lo hubiese pensado antes.

-Sabes que le vas a perdonar.- Intenta reprimir una sonrisa.

-No lo sé. Bueno, te veo mañana que aún tengo que seguir repartiendo esto.- Asiente, me da un abrazo y se mete para dentro.

Sigo repartiendo los dichosos papeles por todas las casas hasta que me doy cuenta de que mis pies han llegado a la calle de la casa de Zayn y que solo me queda por entregárselo a él. Sin saber porque he dejado su calle para el final, como esperando a que vayamos a hablar o que me vaya a perdonar o yo que sé el qué. Bajo la calle hasta el número de su casa y me detengo en su puerta. Sé que todos están en casa, más que nada porque me acabo de patear todo el pueblo de casa en casa y no los he visto. Estoy asustada y a la misma vez impaciente, pero sin pensármelo más de la cuenta toco el timbre y espero a que abran la puerta. Ni siquiera sé quien quiero que me abra la puerta sé que Zayn va a estar enfadado, si veo a su madre se me va a caer el alma, si veo a su hermana me va a llenar de preguntas y lo que si sé es que no me abra su padre. Eso seguro.

-Hola Becca.- Subo la cabeza para saludar pero la tengo que volver a bajar.- Mi hermano no está.- Niega con la cabeza.- Mamá me ha dicho que va a venir pronto. ¿Tú le has visto?.

-Eh...hola Abby...Emm...bueno no...- Me coge de la mano y me hace entrar en su casa. Me intento soltar de su mano para volver a salir pero me es imposible.- Espera Abby no...

-Que sí, ven.- Me dejo guiar, pasamos la entrada y llegamos hasta la cocina después de andar por un pasillo.- Mira mamá.- Mierda. En la cocina se encuentra su madre y su hermana sentadas en la mesa mientras toman té y hasta que he llegado yo hablaban sobre algo que parece tenerlas preocupadas.

-H-hola.- Susurro.

-Rebecca.- Saluda Kate.- Ven, siéntate. ¿Cómo estás?. Mamá, ¿te acuerdas de Becca?.- Su madre me sonríe con cariño.

-Claro que me acuerdo. Esa sonrisa y esos ojos no se olvidan fácilmente.- Sonrío agradecida.-¿Quieres un poco de té?.- Di que no Becca. Zayn te va a matar y tu madre ya ni te cuento.

-Me encantaría.- Y como si estuviera allí cada día tomo asiento en la mesa con ella. Cuando me giro Abby ha desaparecido. Trisha se levanta a echarme el té y Kate me sonríe.

-No esperes encontrar a esa pequeña princesa, se busca unos escondites muy hábiles.- No sé si eso lo hace para jugar o por el contrario quiere esconderse de algo o alguien. Su madre vuelve, me da la taza de té y se sienta con nosotras.

-¿Qué tal todo?. ¡Hace tanto que no hablo con tu madre!.- No me la mientes que me pongo mala...

-Todo va bien. Con ganas de irme ya mañana.- Asiente y después hay silencio por unos minutos. Decido romperlo.- He traído esto.- Saco la carpetita y se la doy a Trisha.- Es el itinerario que vamos a tener, donde puedes contactar con tu hijo y todo eso.

-Mira mamá, te podrían dar uno de esos para el día a día.- Ouh...

-Kate por favor.

-¿Va todo bien con Zayn?.- Tengo una cara más dura...

-Sí.- Asiente Trisha.

-No. Mamá no la mientas. No va bien, Becca. Se va a las siete de la mañana y no vuelve hasta las tres de la madrugada, hace lo que quiere, no va a clase, no estudia, no habla. Solo sabe hablarnos mal, meterse en peleas, beber alcohol y espera a que no tome drogas.

-¡Kate Malik!.- Siento que tengo la piel de gallina y me he ido encogiendo en el asiento cada vez que ha dicho algo de lo que hace.- Becca hija, ¿tú le has visto?.- Niego con la cabeza.

-El último día que hablé con él fue el viernes...- Ambas suspiran.

-Al menos ahora sabemos que hasta el viernes ha estado vivo.- Su madre no está contenta con ese comentario pero asiente dando la razón a Kate.

-Llevamos sin verle desde el domingo pasado.- Llevan más de una semana sin ver a Zayn...- ¿Cómo lo viste?.- Quiero decir que lo vi genial, que hablamos y que estuvimos como siempre. Como siempre que él está bien. Pero no puedo mentir.

-Se presentó a clase, pero la profesora no le dejó pasar así que salí para hablar con él, pero se fue porque está enfadado conmigo.- Me ahorro que mi madre me ha castigado sin verlo.

-Eso ocurrió el viernes pasado...- Susurra su hermana. ¿Ocurrió el qué?. Eso pasó el viernes pasado, mi madre me castigó el miércoles es decir, que lo que le pasó fue dos días después y luego desapareció hasta que le volví a ver el próximo viernes que volvió a desperecer hasta hoy domingo. Madre mía, Zayn, ¿dónde estás?.